De ser unos trazos sin mucho sentido sobre la pared a tener la categoría de arte. Muchos años han tenido que pasar para que el graffiti sea aceptado por la mayor parte de la sociedad, hasta el punto de ser considerada una actividad cultural capaz de desarrollar las habilidades artísticas de los jóvenes. Y es que, tanto la comprensión de las autoridades como el respeto mostrado por estos artistas urbanos ha dado como fruto talleres dedicados al graffiti, como el celebrado en Viator a finales de marzo, en el que participaron una decena de jóvenes.
Bajo la batuta de Nicolás Rodríguez, más conocido en el ambiente graffitero como Stook, los jóvenes de Viator que participaron en el taller aprendieron y mejoraron el manejo del spray y pistolas aerográficas, con las que dar soluciones a fachadas y otros espacios.
Nicolás Rodríguez es un artista urbano multidisciplinar almeriense con proyección internacional, profesor de Enseñanza Secundaria, fue finalista del Certamen Arte y Graffiti del Instituto Andaluz de la Juventud en 2.006.
Los graffiti resultado del curso se han realizado en la explanada donde antes se ubicaba el antiguo instituto, para lo cual se ha contado con el permiso pertinente del Ayuntamiento de Viator. El taller se celebró durante los días 29, 30 y 31 de marzo.