El Consejo Económico y Social de la Región de Murcia ha acogido hoy miércoles la presentación del Informe ‘El modelo asistencial a personas mayores de la Región de Murcia: una propuesta sociosanitaria’, coordinado por Carmelo Gómez, director de la Cátedra de Humanización y Cuidados a Mayores de la UCAM, y en cuya elaboración ha participado Paloma Echevarría, decana de la Facultad de Enfermería.
La realidad social actual que rodea al envejecimiento de la población, y la que nos espera en los próximos 5-10 años, hace necesario un cambio de paradigma asistencial. Si bien es cierto que el actual modelo de provisión de cuidados en instituciones, concretamente residencias y centros de día, ha ido experimentando cambios y progresos, estos son insuficientes para adaptarse a las necesidades de una parte nada desdeñable de la población murciana y española, destaca el informe ‘El modelo asistencial a personas mayores de la Región de Murcia: una propuesta sociosanitaria’, presentado hoy en la sede del Consejo Económico y Social de la Región.
El estudio incluye un abanico de conclusiones fruto de los numerosos testimonios recogidos en entidades y colectivos del ámbito de las personas mayores, tanto en la Región de Murcia como a nivel nacional, así como una serie de recomendaciones dirigidas tanto a los gestores de las residencias y centros de día, como a la Administración Pública regional, tanto del ámbito sanitario como social.
Entre ellas se observa que las residencias deben hacer un claro esfuerzo por gestionar en función de las necesidades de las personas y no tanto del servicio concertado por la Administración Pública. Para ello, “es necesario actualizar la normativa regional en cuanto a las condiciones que hacen que funcionen los centros, que va enlazado con un cambio de paradigma. Actualmente hay un solo modelo asistencial de residencia, donde entra todo el mundo; hace 20 años probablemente era necesario, pero actualmente se ha quedado desfasado”, afirma Carmelo Gómez coordinador del informe y director de la Cátedra de Humanización y Cuidados a Mayores de la UCAM; quien además apunta que “la realidad social nos dice que hay diferentes necesidades asistenciales y son necesarios distintos modelos para poder proveer ese tipo de asistencia”, distinguiendo entre personas mayores con y sin dependencia funcional, con cuadros de tipo geropsiquiátrico y con discapacidad intelectual en sus diferentes grados.
Esto ha llevado, según recoge el informe, a que, bajo la denominación de un determinado grado, se incluyan perfiles asistenciales muy diferentes, complicando de manera clara la satisfacción de mayores y familiares, haciendo hincapié en que lo recomendable es diseñar diferentes modelos asistenciales en función de los perfiles a cuidar, por lo que ya no estaríamos hablando de modelo de residencias/centros de día -en singular-, sino de modelos asistenciales particulares -en plural-.
Mayor apoyo de la administración
Según se desprende del documento, los gestores de residencias y centros de día han hecho verdaderos esfuerzos para proveer una atención adecuada, aunque esta está teniendo un techo de cristal claramente condicionado por el precio por plaza que actualmente paga la administración pública por los servicios concertados. “Lógicamente, si sumamos modelo asistencial con nueva normativa, eso va ligado inevitablemente a nueva financiación; si no hay financiación, no puede haber modelo, y por lo tanto no puede haber actualización”, destaca Carmelo Gómez. Los gestores entrevistados han manifestado en numerosas ocasiones su disponibilidad para mejorar ratios y programas asistenciales, aunque esto no es posible sin un esfuerzo claro e inminente por parte de la administración pública.
Situación de la calidad asistencial en la Región
En cuanto a la calidad asistencial en las residencias de la Región de Murcia, Carmelo Gómez ha destacado que esta es buena, “pero que preste buen servicio no significa que sea el mejor servicio, y a eso tenemos que aspirar. Pero no por una cuestión de empresa, ni de tipo proyecto organizativo, sino porque las personas mayores que atendemos se lo merecen; son personas vulnerables que necesitan que hagamos un esfuerzo, precisamente para mejorar la atención”.