La Universidad Internacional de Andalucía ha abierto el plazo de matriculación para la II edición de su Curso de Experto en Psicología y Comunicación Política e Institucional, de modalidad virtual y orientado a aquellos profesionales que deseen especializarse en el sector de la comunicación o la asesoría institucional y política. El plazo de matriculación está abierto hasta el próximo 1 de septiembre.
El curso, que podrá seguirse sin límite geográfico gracias a su modalidad virtual, se desarrollará entre el 5 de septiembre y el 4 de diciembre de este año. Dirigido por el doctor José Antonio Climent, de la Universidad de Huelva, y la consultora de comunicación política e institucional Charo Toscano como codirectora, el curso cuenta entre sus docentes a profesionales del mundo de la comunicación, la academia, la asesoría institucional, la seguridad y la imagen personal.
A lo largo del período formativo, el alumno podrá acercarse con ellos a casos de éxito para una comunicación eficaz en sus organizaciones. Completan el plantel académicos de primer nivel que reflexionarán sobre las líneas de trabajo presentes y futuras del sector. Se trata de una titulación, por sus características, única en el sistema universitario andaluz, que proporciona además una metodología adaptada al perfil potencial de los alumnos profesionales en activo.
Los interesados pueden obtener más información sobre el título y consultar sus guías docentes en la página web de la UNIA, así como cumplimentar la solicitud desde el portal de matriculación.
Qué hace único a este título de Psicología y Comunicación Política
El título ofrece una especialización de calidad a quienes quieran desarrollar su vida profesional en gabinetes y consultoras de comunicación, así como en la asesoría y consultoría políticas, trabajar en el diseño de campañas estratégicas, además de los equipos de comunicación de administraciones públicas. Estas entidades y corporaciones afrontan el reto de adaptar sus procesos comunicativos, tanto externos como internos, a una realidad cambiante, marcada por la irrupción constante de nuevas tecnologías que aparecen para sustituir a otras apenas implantadas. A ello, suman la prioridad de comunicar desde la emoción como estrategia para dominar los distintos escenarios y casuísticas de la comunicación, construyendo un relato capaz de proporcionar credibilidad y confianza al público objetivo.
Así, la formación asegura la integración de herramientas clave como la inteligencia artificial, la geolocalización o la difusión de contenido (en directo o vía streaming), sin descuidar los fundamentos comunicativos que justifican su uso. Todo ello desde la perspectiva que ofrece la psicología sobre el consumidor, usuario o votante, algo importante en un contexto social cada vez más líquido, con tendencia a lo efímero y de características mutables.