{mosimage}Hoy miércoles, 12 de agosto, a partir de las diez de la noche, tumbados en la arena de la playa de Las Salinas se podrá disfrutar de imágenes increíbles del espacio proyectadas en una pantalla, mientras se escuchan historias increíbles sobre el Universo. Se podrá casi tocar la Luna, los planetas y las estrellas, mirando a través de telescopios que la asociación astronómica Orión montará en el paseo marítimo y pedir miles de deseos, porque una lluvia de estrellas fugaces, las Perseidas, tendrán su máximo esta noche.
Se trata de una actividad que se celebra por cuarto año consecutivo, dentro del programa A pie de calle, y gracias al Área de Educación y Cultura del ayuntamiento de Roquetas de Mar. En relación con el proyecto de construcción del futuro MCN (Museo de la Ciencia y la Naturaleza) que se construirá en el municipio, y por ser el 2009 el Año Internacional de la Astronomía, la Unidad de Divulgación científica lo celebrará en la playa de Roquetas de Mar, en esta actividad que también está incluida en el programa oficial de la Asociación Internacional de Astronomía (AIA).
Por otra parte, Manolo Carambolas ofrecerá en el Anfiteatro de Roquetas de Mar a partir de las 21.30 horas cerca de una hora de espectáculo de mimo, clown y malabares usando como elementos los palos y bolas de billar y un balón de fútbol, en una propuesta innovadora y muy original.
Carambolas descubrió el mundo del clown, después de disfrutar de un espectáculo de poesía en un teatro. Según el artista “ese día note que no había nada mas maravilloso en el mundo que la gente se ria y se lo pase bien. Al cabo de unos años ya empecé con todo esto de los malabares”. El gran reto de Carambolas es mejorar su pantomima y sus malabares, y seguir triunfando como lo viene haciendo hasta ahora. De momento, hace mimo, clown, malabares, aunque su especialidad es el mimo y pelotas.
¿Un dandy? ¿Un campeón? ¿Jugador de billar o de fútbol? ¿Un showman?. Es Manolo Carambolas, de inefables juegos malabares, infalible sobre su particular mesa de billar, una mesa que no existe pero sobre la que el espectador pondrá una atenta mirada, seguirá los efectos y recorridos de las bolas hasta desternillarse con el humor y las habilidades de las partidas de este jugador tan especial.