El Faro de Roquetas de Mar acoge durante la primera quincena de agosto una exposición curiosa, llamativa y muy interesante, que rompe con las muestras que se vienen realizando a lo largo de todo el año. En esta ocasión, la artista Ana Morel, bordadora artesanal almeriense muestra una serie de bordados artesanales que son de una gran belleza.
En esta muestra se pueden ver vestidos, trajes, abanicos, mantones e incluso un paraguas que están bordados por las manos maestras de Morel. Esta genial artista y gran persona ha conseguido llegar a las pasarelas andaluzas con propios diseños de costura y bordado artesanal, en donde destaca con especial atención la técnica del recamado o plumati.
En su tierra natal almeriense, ha sabido recuperar la materia prima de sus antepasados, el esparto, llevando sus diseños después de un tratado especial en forma de saco, haciéndolo más exclusivo. En la exposición del Faro de Roquetas de Mar llaman poderosamente la atención los capotes bordados que son una auténtica obra de arte. “Hay muchos toreros que tienen capotes bordados por mí. Tienen mucho trabajo, pero son auténticas obras de arte”.
Ana Morel nació y se crió entre bastidores, encajes, bolillos, bordados tradicionales de la artesanía, ya que su familia cuenta con una larga trayectoria histórica como profesionales de las enseñanzas artesanales tradicionales de la provincia de Almería, en donde destacaron como maestros artesanos en el arte del bordado artesanal.
Esta mujer está emparentada por la línea directa con Luisa Navarro, que fue directora de la Escuela de Artes y Oficios de la ciudad de Almería en los años treinta y de su época se conservan diversos trabajos artesanales de gran calidad artística.
En esta muestra también hay una serie de imágenes religiosas realizadas con la técnica pintada a la aguja, algo que solo ella realiza en toda Andalucía. “Es una técnica muy trabajosa, pero que luego los resultados son fascinantes”.
Ana Morel, además, ha fomentado su formación con estudios musicales eligiendo como instrumento de cuerda la bandurria llegando incluso a debutar ante un público con apenas nueve años. En su colegio formaba parte de la tuna del coro, teatro y otras actividades relacionadas con el arte.
Recibió formación de dibujo artístico que le ha servido para crear esos diseños únicos para luego poder incluirlos en sus bordados artesanales. Estudios que cursó en la Escuela de Dibujo Artístico de Melilla. Su vida ha estado repartida por diversas ciudad españoles como A Coruña, Melilla, Córdoba, Madrid.