El colectivo Ciudadanos por la Salud de Carboneras ha puesto en duda la legalidad de la instalación, en un nuevo polígono industrial del municipio, de varias empresas. El motivo que tienen estos ciudadanos para oponerse a l instalación de estas industrias reside en los niveles de contaminación que provocan con su actividad, centrada en el sector de los hidrocarburos y el cemento.
Concretamente, las tres empresas que han levantado a estos vecinos son una planta de refinado de aceites vegetales, una planta de biodiéses y otra de molienda y envasado de cemento.
Los argumentos esgrimidos por este colectivo vecinal para posicionarse en contra de la ubicación de estas empresas en su municipio está relacionado con el elevado nivel de emisiones contaminantes que genera la actividad de estas industrias.
Ciudadanos por la Salud de Carboneras se opone a la planta de refinado de aceites vegetales, que conllevaría un “aumento del tráfico marítimo”, que conlleva “un riesgo de vertido de carga en la zona del litoral”. Frente a la planta de biodiésel, este colectivo mantiene que en la obtención de este hidrocarburo se emplean “sustancias químicas altamente contaminantes y nocivas, como es el caso de la sosa cáustica y el metanol”; de este proceso se obtiene biodiésel tipo B100, que mediante una estación de servicio ubicada en el mismo polígono, abastecería a aquellos vehículos de transporte del mismo. La planta supondría la emisión de “180.000 toneladas anuales de NOx”.
Por último, la planta de molienda de cemento conllevaría para el municipio un aumento en el tráfico marítimo, así como la emisión de toneladas de clinker, “un material compuesto por multitud de sustancias químicas que son nocivas además de irritantes y molestas. Y cuyo polvo produce asma, problemas alérgicos, conjuntivitis e irritación en la piel”.