¿Son buenos tiempos para la libertad de prensa? Pues a pesar de que los medios y los formatos se han multiplicado, no corren buenos tiempos. Las presiones a los periodistas y la falta de credibilidad de los medios son dos de sus grandes males, según se ha puesto de manifiesto en un acto organizado por la Cátedra Unesco de Comunicación de la Universidad de Málaga, para celebrar el Día Mundial de la Libertad de Prensa.
Los expertos participantes en esta cita, la única registrada por la Unesco en España, han expuesto informes, documentos e impresiones acerca de las presiones que sufren los periodistas en muchos países del mundo y la incidencia de este problema en la credibilidad de los medios.
El acto se ha llevado a cabo en el Centre Pompidou Málaga. Ha contado con la asistencia de numerosos estudiantes de Periodismo, que han asistido a las charlas impartidas por el director de la Cátedra Unesco de Comunicación, el catedrático de Bernardo Díaz Nosty; el director general de Comunicación de la Universidad de Málaga, Carlos Pérez Ariza; el director del Informe de la Profesión Periodística de la Asociación de la Prensa de Madrid, Luis Palacio; la profesora Ruth de Frutos y Lola Fernández, secretaria del Sindicato de Periodistas de Andalucía.
Precarización del oficio en la prensa
Todos ellos han puesto sobre la mesa la situación del Periodismo en nuestros días, mientras que Luis Palacio ha avanzado algunos datos del Informe de la Profesión de este año, en el que, si algo queda claro, es la creciente precarización del oficio, el paro y el cada vez mayor número de periodistas autónomos. En esta línea también ha ido la intervención de Lola Fernández.
Pero han sido las presiones sobre los periodistas europeos, que ponen en riesgo la libertad de prensa, las que han centrado el debate. De hecho, así concluye el informe de las profesoras de la Universidad de Malta Marilyn Clark y Anna Grech, encargado por el Consejo de Europa. Los resultados del estudio, basado en una encuesta a un millar de profesionales de la información, ponen de manifiesto el riesgo que sufren los profesionales de la información.
Día Mundial de la Libertad de Prensa
El Día Mundial de la Libertad de Prensa fue proclamado por la Asamblea General de Naciones Unidas a instancias de Unesco en 1993 y, este año, se centra en la defensa de los periodistas frente a las amenazas que perturban su trabajo profesional, a través del lema de las tres “p”: prevención de la violencia, protección de los profesionales en peligro y persecución de quienes cometen atentados contra la libertad de prensa.
Hoy mismo la directora general de Unesco, Irina Bokova, ha presidido en la ciudad de Yakarta la celebración mundial. Además del informe del Consejo de Europa, se ha presentado en el Pompidou un estudio sobre la credibilidad de los medios, basado en una investigación de la Cátedra Unesco para Fundación Telefónica.
Premio Internacional
Por otro lado, la Cátedra Unesco de Comunicación entrega cada año en el mes de noviembre el Premio Internacional Libertad de Prensa, que en 2016 recayó en el periodista turco Dogan Tiliç. Le precedieron la periodista mexicana Lucía Lagunes; la periodista congoleña Caddy Adzuba, los periódicos The New York Times, The Guardian, Le Monde, Der Spiegel y El País, por la publicación de los papeles de Wikileaks; Fran Llorente, director de los servicios informativos de Televisión Española; Gervasio Sánchez, por su trabajo como fotoperiodista en la denuncia de conflictos bélicos silenciados y en la defensa de la ética profesional y los derechos humanos; y Andrés Rábago, El Roto, por la crítica sugerente de sus viñetas en el diario El País.