Mané Sánchez la Chica, profesor doctor, investigador, coordinador de Grado y presidente del Tribunal Fin de Carrera de la ETS de Arquitectura de la UMA, ha sido recientemente nombrado por el obispado Arquitecto de la Catedral de Málaga.
Sánchez la Chica, responsable de importantes actuaciones de conservación y adecuación de la catedral malagueña, ha venido actuando de forma especial sobre las cubiertas del templo, en una labor que comenzó en el año 2011 y que hoy, entre otras mejoras, permite una excelente visita. Visitas que el profesor realiza habitualmente con sus estudiantes “tratando de aprovechar una verdadera joya de la ciudad y un lugar inmejorable para aprender Arquitectura”
Ahora, con su reciente nombramiento, el profesor se pone al frente del Plan Director de la Catedral, un documento que en palabras del arquitecto “sirve de guía para todas las acciones necesarias para la conservación, adecuación y promoción del monumento”.
El nuevo arquitecto de la Catedral de Málaga cree fundamental la aprobación de dicho Plan Director, hoy en manos de la Junta de Andalucía, ya que “supone una hoja de ruta que sirve para subsanar las deficiencias y solventar los problemas que presenta el templo”. Asimismo lo considera “clave para conseguir la financiación necesaria para los distintos proyectos de conservación y desarrollo del templo que se aprueben acometer”.
El profesor de la Universidad de Málaga ha recibido el nombramiento como “un honor y un privilegio”. Para Sánchez la Chica “La Catedral de Málaga es el edificio más importante de Málaga, el más bello, el mejor construido y un documento vivo de las etapas que esta ciudad ha vivido en su historia”.
Catedral de Málaga una obra sin acabar
Una historia que se detiene en el caso del templo malagueño de forma brusca, cuando sus obras de construcción se pararon hace ahora 234 años. Sánchez la Chica piensa que “muchos ciudadanos, cuando ven la parte inacabada de la Catedral, tienden a verla como bellas ruinas, cuando lo que en realidad vemos es una obra sin acabar, lo que se hace muy evidente en el caso de una de las dos torres y en el frontón central”.
En este sentido, el profesor aboga por continuar las obras de la catedral malagueña, salvando un lapso constructivo de más de dos siglos: “Mi apuesta es que se pueda continuar con su edificación, completar un templo que comenzó a levantarse en 1528 y se quedó sin concluir”. Una obra inacabada que, además, origina distintos problemas al templo: “El más importante es el de las filtraciones de agua desde las cubiertas y que origina graves consecuencias al edificio. Es evidente que necesitamos estudiar y acometer una solución definitiva”.
La Catedral de Málaga es una de las joyas renacentistas más valiosas de Andalucía. Su proceso constructivo comenzó 1528 y se detuvo en 1782. Las originarias trazas, de estilo Gótico, derivaron en un proyecto renacentista en cuyos planos participaron Diego de Siloé y Andrés de Vandelvira. La Catedral es una síntesis de estilos arquitectónicos entre los que prevalece el Renacimiento sobre el primer Gótico de la antigua fábrica y elementos barrocos añadidos desde principios del siglo XVIII.