La Universidad de Almería ha empezado este 1 de diciembre a coordinar uno de los mayores proyectos de innovación que tendrá una duración de cuatro años. Se trata del proyecto SABANA que persigue conseguir nuevos biofertilizantes y biopesticidas alternativos a los productos químicos actualmente utilizados en agricultura.
Un logro que posibilitará obtener frutas y hortalizas, así como una acuicultura más segura para el consumidor y el medioambiente. Precisamente, la UAL está acogiendo este jueves la reunión de comienzo de proyecto en la que participan 50 investigadores de Alemania, Hungría, Bélgica, República Checa y España.
El director del grupo de investigación de Biotecnología de Microalgas Marinas, Emilio Molina, ha dado más detalles del proyecto SABANA que permitirá a la UAL liderar esta iniciativa a nivel europeo mediante la instalación de una planta demostrativa de las tecnologías desarrolladas, con capacidad para producir hasta 300 toneladas al año de microalgas y productos derivados. Productos que serán evaluados para su introducción en diferentes mercados, en lo que se espera que sea una plataforma de desarrollo para la biotecnología de microalgas en España y Europa.
Este proyecto incluye también la creación de un centro de investigación y desarrollo será un punto de colaboración y aprendizaje tanto para empresas como investigadores y estudiantes. Se impartirán cursos de diferentes niveles, y se creará un servicio de acceso online a la información generada durante el proyecto. De esta manera, la UAL se convertirá en referente mundial de la formación de microalgas marinas.
En el acto también han intervenido Kerstin Rosenow, jefa de la Unidad B2 Recursos sostenibles para la seguridad alimentaria y el crecimiento, Comisión de la UE; Frank Rogalla, director de Innovación y Tecnología FCC Aqualia; y David Iglesias, director general en Grupo Biorizon.
La Universidad de Almería coordina este proyecto que cuenta con un presupuesto de 10,6 millones de euros y en el que colaboran empresas de gran relevancia, además de la Fundación Cajamar y diversas instituciones como el Instituto de Investigación y Formación Agraria Pesquera, Alimentaria y de la Producción Pesquera (IFAPA), la Consejería de Economía y la Consejería de Medioambiente y Ordenación del territorio de la Junta de Andalucía, y la Subdelegación del Gobierno y el Ayuntamiento de Almería.
El proyecto SABANA está financiado por la Unión Europea dentro del programa “Blue Growth”, enfocado al uso sostenible de los recursos marinos, y es uno de los dos únicos proyectos europeos aprobados en esta convocatoria.