El presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, ha definido a la educación como la herramienta con la que se puede vencer la crisis económica. Esta afirmación ha sido parte del discurso que ha ofrecido este mediodía en el Auditorio de la Universidad de Almería, con motivo de los actos protocolarios organizados para la apertura oficial del curso académico en Andalucía, y donde se han congregado, además de las autoridades locales, los rectores de las nueve universidades andaluzas y el consejero de Innovación, Martín Soler.
Durante su intervención en el acto, José Antonio Griñán ha definido a la universidad como un elemento de progreso para la sociedad andaluza y al tiempo que ha destacado el compromiso del Gobierno andaluz con las universidades, la formación de excelencia, la investigación y la innovación impulsada desde los centros universitarios.
La intervención del presidente andaluz ha cerrado un acto que comenzaba con la presentación de la memoria del curso académico 2008-2009, a cargo de la Secretaria General de la UAL, María Luisa Trinidad. Entre los datos que ha aportado, destacaba que, a lo largo del año pasado, los investigadores de la Universidad de Almería lograron obtener financiación para 85 proyectos de investigación, se defendieron 46 tesis doctorales y se crearon 10 empresas de base tecnológica, con lo que ya son 29 EBTs con las que cuenta esta universidad. De ellas, 16 están instaladas en la sede científica del PITA, inaugurada recientemente en el Campus de La Cañada.
Tras la lectura de la memoria, el profesor Juan Fernández Sierra, decano de la Facultad de Educación, ha realizado la lectura de una lección magistral titulada “Educar para la sociedad del conocimiento”. Fernández Sierra ha hecho durante su intervención una cerrada defensa de la educación pública. Poco antes de concluir su ponencia afirmaba que “una educación de calidad para la Sociedad del Conocimiento, sólo puede garantizarla un sistema educativo público de calidad, fuerte y socialmente participado -cosa con la que en los últimos años están coincidiendo cada vez más estudiosos y expertos internacionales de todas las tendencias políticas-. Porque solamente desde un buen sistema público puede garantizarse la pluralidad ideológica, pedagógica, metodológica, étnica, lingüística, sexual y cultural, y sobre todo, la convivencia y experiencia vital acompañada de los niños, niñas y jóvenes de diferente procedencia, clase social, religión, raza o cultura. Un sistema educativo que sea como el mundo real en el que viven y van a vivir nuestros alumnos y alumnas: diverso, multicultural, problemático, cambiante, imprevisible…, en continuo proceso de mestizaje intelectual, cultural y biológico”.
El Rector de la UAL, Pedro Molina, afirmaba que “no está de más recordar a las nuevas promociones de estudiantes el papel fundamental y destacado en la consecución de la democracia en España. Desde hace unos treinta años, ser universitario ha llegado a ser sinónimo de demócrata. En la universidad no hay crisis de valores, pues sabemos cuáles son los valores superiores, irrenunciables y fundamentales y, lo que es más importante, sabemos cómo llevarlos de la teoría a la práctica de nuestros conciudadanos”.
Molina destacaba también que una de las metas que tienen a corto y medio plazo las Universidades es convertirse en campus de excelencia. “Es la única oportunidad de poder competir dentro del ordenamiento global de los estudios superiores. Defendemos su sentido y oportunidad, y creo que se trata de que cada universidad andaluza sea capaz de definir en qué ámbito puede alcanzar esa virtud y virtuosismo para llegar a ser puntera en su especialidad”, afirmaba.