El mayor radiotelescopio del mundo, que en marzo de este año fijaba su diseño definitivo, constituye un desafío que generará tanto innovación tecnológica como sorprendentes avances científicos. En este sentido se han dado dos pasos importantes, con la publicación del Advancing Astrophysics with the Square Kilometre Array y del Libro Blanco Español, publicaciones que ponen de manifiesto las posibilidades para la ciencia española e internacional respectivamente de este revolucionario proyecto.
“El Libro Blanco Español del SKA, fruto del esfuerzo de 119 astrónomos de 40 diferentes centros de investigación, muestra el gran interés de los investigadores españoles por el SKA” apunta Miguel Ángel Pérez-Torres, investigador del Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA-CSIC) que coordinó la edición. “Este libro representa un hito en los esfuerzos de toda la comunidad astronómica, cuyo objetivo reside en que nuestro país pase a formar parte de pleno derecho de este instrumento”.
El libro blanco presenta estudios de prospectiva con el SKA que van desde la formación de discos protoplanetarios y estrellas hasta la formación de grandes estructuras a gran escala en el universo, pasando esencialmente por todas las áreas de la astrofísica donde hay investigadores españoles involucrados.
“Recientemente tuvo lugar el primer congreso para la preparación de los proyectos clave de ciencia de SKA, que harán uso de la mitad del tiempo de observación de esta megainfraestructura científica durante sus primeros cinco años de funcionamiento -señala Lourdes Verdes-Montenegro, científica del Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA-CSIC) y coordinadora de la participación tecnológica de España en el SKA-. Los esfuerzos realizados por la comunidad científica española se pusieron de manifiesto en la participación de astrofísicos de nuestro país en prácticamente todos los grupos de trabajo, aunque podrían verse frustrados si España no se convierte pronto en país miembro, ya que las posiciones de liderazgo están vedadas para los no miembros”.
Por su parte, el Advancing Astrophysics with the Square Kilometre Array constituye el nuevo libro de ciencia oficial del SKA, y supone la culminación de más de un año de trabajo tanto del grupo de ciencia del proyecto como de la comunidad científica internacional, al incluir 135 capítulos en los que han contribuido 1.213 investigadores de 31 nacionalidades.
“Esta publicación constituye un valioso testimonio del creciente interés y del alcance del SKA desde la edición del último libro hace diez años”, señala Robert Brown, Director científico del proyecto.
El libro, que consta de dos volúmenes, cubre numerosas áreas científicas, entre ellas el estudio de las primeras etapas del universo y la formación de las primeras estrellas, de los púlsares y de las ondas gravitacionales, de la materia y energía oscuras, la búsqueda de vida en otros planetas a través de trazas moleculares y de potenciales inteligencias extraterrestres a través de señales de radio.
Sobre SKA
El Square Kilometre Array (SKA) es un proyecto internacional destinado a construir un radiotelescopio que será decenas de veces más sensible y miles de veces más rápido en la observación del cielo que las mejores instalaciones radioastronómicas actuales.
El SKA no es un solo telescopio, sino un conjunto de telescopios, un array, que se extenderá a lo largo de grandes distancias. El SKA se construirá en dos fases: la primera (SKA1) se construirá en Sudáfrica y Australia y en la segunda (SKA2) se extenderá por ambos continentes hasta distancias de miles de kilómetros.
SKA permitirá realizar contribuciones revolucionarias a la astrofísica, la astrobiología y la física fundamental, áreas actualmente objeto de investigación en los principales centros de España, así como a la geofísica y geodesia.
Pero SKA también supondrá una revolución tecnológica en campos como la distribución y procesado masivo de datos a gran velocidad (del orden de trillones de operaciones matemáticas por segundo), la generación, almacenamiento y distribución de calor y electricidad, o la e-Ciencia como herramienta clave para permitir la colaboración a nivel mundial necesaria para desarrollar y explotar este instrumento.
La Organización SKA, con sede en el Observatorio de Jodrell Bank (Reino Unido), se estableció en diciembre de 2011 como una empresa sin ánimo de lucro con el fin de formalizar las relaciones entre los socios internacionales y centralizar la dirección del proyecto. Diez países son actualmente miembros de la Organización del SKA: Australia, Canadá, China, India, Italia, Nueva Zelanda, Sudáfrica, Suecia, Países Bajos y Reino Unido. Otros países han expresado su interés en unirse a la Organización SKA en los próximos años., siendo España regularmente invitada a las reuniones de su Junta directiva desde 2014.