Un nuevo sistema de refrigeración por vapor de agua reduce en 12 grados la temperatura en el interior de un invernadero y permitirá así prolongar la producción agrícola durante todo el año. El sistema se basa en la refrigeración que producen microgotas de agua y responde a la necesidad surgida hace unos años de controlar la temperatura ambiente y la humedad en el interior de la estructura de plástico.
En su búsqueda por obtener técnicas que permitan una mayor optimización de los recursos hídricos, la empresa sevillana Ingeniatrics ha desarrollado un nuevo sistema que mejora los ya existentes empleando la micronización de agua. Así se consigue refrescar el ambiente de una forma más eficaz. Las pruebas realizadas demuestran un descenso de 4-5 grados bajo plástico, aunque se puede conseguir una reducción de hasta 12 ºC.
En concreto, este sistema de aspersión (cuya tecnología patentada ya ha sido empleada con éxito en el Real de la Feria de Sevilla) utiliza una boquilla que expulsa gotas del rango de un nanómetro, el equivalente a la milmillonésima parte de un metro. Al tratarse de partículas microscópicas, el agua permite abarcar una superficie mayor, enfriando el interior más rápidamente.
El proyecto Reinver, financiado por la Corporación Tecnológica de Andalucía (CTA), se está realizando en la Estación Experimental de Las Palmerillas, donde se investiga sobre sistemas de climatización desde hace una década al tratarse, según asegura el director del centro, Jerónimo Pérez Parra, de una “prioridad” para la agricultura de zonas cálidas como la almeriense.
Como novedad, este sistema (al combinar aire y agua en el nebulizador) permite un ahorro de agua importante frente a aparatos clásicos, que suelen obstruirse con demasiada facilidad. Además, según los estudios, sólo consume una octava parte de la energía que necesita un sistema de aire acondicionado. Incluso, al trabajar a baja presión, permite la utilización de agua de menor calidad y, por tanto, más barata.