‘La senda de los almohades’, escrito por Dolores Villalba Sola responde a algunos de los enigmas sin resolver y presenta los resultados del primer análisis global realizado sobre el patrimonio arquitectónico almohade.
La eclosión de los almohades se sitúa en el Norte de África. El califato almohade logró aunar bajo su mando un amplio territorio con una gran variedad de pueblos que se extendían desde los límites actuales de Mauritania hasta llegar a Portugal, pasando por el reino de Marruecos, Argelia, Túnez, Libia y España.
En los comienzos del siglo XII, entre montañas escarpadas y nieves perpetuas, en las profundidades mismas de la Cordillera del Atlas, se forjó el que sería el segundo gran Califato del Occidente islámico: el califato almohade. Su origen se encuentra en la figura de Muhammad ibn Tumart, ideólogo y líder espiritual que marcó las pautas doctrinales de los Unitarios, cuyos dominios se extendieron a ambos lados del Estrecho de Gibraltar.
El legado artístico trazado por este Califato es uno de los más relevantes de toda la Edad Media. Un hecho que ha propiciado el aumento de los estudios acerca del mismo, aunque todavía existen importantes incógnitas a su alrededor.
Este libro responderá a algunos de los enigmas sin resolver, presentando los resultados del primer análisis global realizado sobre el patrimonio arquitectónico almohade. Así, con este objetivo se exponen en el volumen los ejemplos más destacados de esta producción arquitectónica, en relación con su contexto histórico y territorial, lo que permitirá al lector conocer la herencia patrimonial compartida, por ambas orillas del Estrecho de Gibraltar, bajo la senda de los almohades.
Según la autora, Dolores Villalba, “la herencia patrimonial dibujada por los almohades a lo largo de su califato es, sin duda, una de las más significativas del occidente islámico medieval. Esto se debe no solo a la calidad de las obras creadas por los unitarios, sino también al grado de innovación alcanzado por las mismas y al aumento de su producción. Una cuestión, esta última, que se refleja de forma clara en la gran cantidad de restos que hemos conservado pertenecientes a este periodo”.
El libro, de 315 páginas, profusamente ilustrado con fotografías, mapas y dibujos, se estructura en seis capítulos que tratan de: “Contexto histórico”, “Arquitectura y Urbanismo almohade. Caracterización y simbología”, “Las grandes capitales almohades: Tinmal, Marrakech, Sevilla y Rabat”, “Reflexiones finales”, y “Fuentes y bibliografía general”, así como una introducción y cuatro anexos que se adjuntan en CD.