Mucho cuidado con frotarse los ojos: por qué los experto desaconsejan esta manía

Frotarse los ojos es una de las reacciones más normales. Todos la hacemos a diario cuando tenemos sueño, estamos cansados o, simplemente, sentimos algún tipo de picor. Sin embargo, lejos de ser inofensivo, este hábito comporta una serie de riesgos para la salud ocular, que pueden afectar incluso a la capacidad de las visión. Expertos de la chilena Universidad de Talca (UTalca) explican porqué de debe abandonar esta práctica.

Los ojos son una de las partes más delicadas y expuestas del organismo humano. Tienen sus propios sistemas de protección, como las lágrimas y el propio parpadeo, que lo ponen a salvo de las agresiones ambientales como el polvo. Pero no son capaces de salvaguardarlos de todas las agresiones, y mucho menos de las que nos provocamos nosotros mismos, aunque sea de forma involuntaria.

Por qué los expertos desaconsejan frotarse los ojos

Los expertos desaconsejan frotarse los ojos porque “se puede acelerar o aumentar el grado de astigmatismo, ya que ésta es una irregularidad de la córnea, que es un tejido blando y al estar frotando constantemente va a generar que aumente”, explicó la oftalmóloga de la Escuela de Medicina de la UTalca, Nelsareth Campos.   

La académica agregó que incluso puede causar queratocono, una enfermedad ocular que se caracteriza por el adelgazamiento y deformación de la córnea, lo que puede provocar una visión borrosa y distorsionada, dificultando tareas diarias como leer y conducir. 

Además, al llevar nuestras manos a los ojos se podría generar una infección o irritación. La oftalmóloga recomendó utilizar lágrimas artificiales en caso de que nos molesten o piquen.  

Cuáles son las enfermedades oculares más comunes

La experta de la UTalca también explicó cuáles son las enfermedades oculares más prevalentes. Se trata de los vicios de refracción, que son astigmatismo, hipermetropía, miopía y presbicia, ésta última se presenta en mayores de 40 años. “Los vicios de refracción forman parte de la herencia, gran parte están dentro de nuestra carga genética, sin embargo, existen algunas condiciones externas que los pueden aumentar, por ejemplo: frotarse los ojos y el astigmatismo”, detalló.  

En esta línea, la académica detalló que el uso y el abuso de la visión cercana puede aumentar miopía, sobre todo en niños. “ya que el organismo comienza a tratar de ver mejor de cerca y se miopiza más. El factor que protege esto es aumentar las actividades al aire libre”, recalcó.  

En este sentido, Campos subrayó la importancia de llevar a los niños al oftalmólogo antes de los cuatro años para determinar si existen alteraciones. “Los niños no dicen que ven mal, porque no saben cómo es ver bien. Entonces, es sumamente importante que se puedan controlar a tiempo, porque la mayoría del desarrollo ocular se da antes de los nueve años, entonces si llegamos al examen después de esta edad perdemos la oportunidad de poder tratar la patología”, detalló.  

Además de los mencionados vicios de refracción existen otras enfermedades tales como las cataratas, “que es la primera causa de ceguera reversible en el mundo. Pueden ser congénitas, es decir que pueden estar presentes desde el nacimiento, por lo cual también es importante el examen visual en el niño, pero también se presentan en los adultos mayores, ya que es parte del proceso de envejecimiento”, explicó Campos.  

Otra patología común es el glaucoma. “Es una de las causas de ceguera irreversible, ya que las fibras nerviosas que se pierden del nervio óptico por esta patología no se pueden recuperar”, detalló y advirtió que el glaucoma primario de ángulo abierto -que es el más común- no presenta síntomas ya que la visión se va perdiendo de forma periférica, por lo que es fundamental realizase exámenes oftalmológicos.  

La especialista detalló que la conjuntivitis también es frecuente, “pueden ser virales, bacterianas, tóxicas, entre otras. En esta época tenemos una alta prevalencia de conjuntivitis alérgicas”.