El Parque de las Ciencias de Granada presenta un recorrido por la ciencia hecha en época musulmana a través de la exposición «Al-Andalus y la Ciencia. Un viaje al pasado científico», que se puede ver en el pabellón Tecnoforo.
Esta exposición se vuelve a programar cuando se cumplen los 20 años de su primera inauguración en el Parque de las Ciencias, fruto de la colaboración con la fundación El Legado Andalusí. En la exposición se presentan los conocimientos científicos y tecnológicos que nos dejaron los sabios andalusíes entre los siglos VIII y XV.
En ella queda patente el nivel científico alcanzado en ciertas disciplinas como la astronomía, las matemáticas, la medicina, la botánica, la farmacología, la agronomía o la navegación. Con la ayuda de réplicas, maquetas modelos, mapas, paneles, fotografías y elementos interactivos, el visitante conocerá con detalle la originalidad de la ciencia en al-Andalus, su influencia y su legado como fuente de transmisión a Europa y a todo el mundo.
En sus palabras de bienvenida, Luis Alcalá, director del Parque de las Ciencias, ha valorado el papel del Parque como espacio de concordia, de encuentro y colaboración entre instituciones. Tras él, han intervenido los dos delegados territoriales de la Junta de Andalucía en Granada: Fernando Egea, de Turismo, Cultura y Deporte, y Mª José Martín, de Desarrollo Educativo y Formación Profesional, que han destacado la influencia del conocimiento científico andalusí en el desarrollo de la ciencia hoy en día.
La presentación ha concluido con una visita guiada por Inmaculada Cortés, directora del departamento de Cultura de la fundación El Legado Andalusí.
Cuatro áreas que despliegan el conocimiento científico andalusí
La muestra, que mantiene su estructura conceptual y expositiva, se organiza en cuatro áreas: Matemáticas y Astronomía; Medicina, Farmacología y Botánica; Agua y Agricultura y Navegación, e incorpora nuevos elementos museográficos como la reproducción a escala de una noria de Albarracín (Teruel), las maquetas de una rueda de noria de tradición árabe y de la Alhambra de Granada, un ábaco del siglo IX y un módulo de materiales constructivos en Al-Andalus. Se incorpora al contenido permanente del museo y podrá visitarse de martes a sábados, en horario de 11 a 14 horas y de 16:30 a 19 horas y los domingos, de 11 a 14 horas.
La visita se inicia con una introducción a al-Andalus y a sus diferentes etapas históricas y, posteriormente, dirige a los visitantes en el fascinante mundo de la ciencia en al-Andalus, apoyándose en el discurso expositivo que se expone en tres idiomas: castellano, inglés y árabe.
El área de Matemáticas y Astronomía, acerca al visitante al mundo matemático andalusí que destacó por el cálculo y la geometría. La astronomía también se desarrolló ampliamente pues era necesaria para diferentes usos cotidianos.
El área de Medicina, Farmacología y Botánica ilustra las investigaciones médicas destacando algunas disciplinas como la oftalmología. En aquella época el campo de la medicina no estaba parcelado y el médico solía ser, además de clínico, lo que hoy día, salvando las distancias, llamaríamos farmacólogo y botánico.
El área de Agua y Agricultura se centra en el desarrollo de los diferentes sistemas hidráulicos en época andalusí como norias, qanats, acequias, minas o aljibes y la evolución en las tecnologías hidráulicas. De forma paralela, se introdujeron nuevos cultivos —antes desconocidos en Occidente— como la caña de azúcar, algodón, arroz asiático, cítricos, plátanos, palmera datilera y algunas hortalizas y verduras.
El área de Navegación y Cartografía abordaba la extensión de los territorios musulmanes y las aportaciones al desarrollo náutico.
Otros contenidos se articulan en torno a la Columna de la Sabiduría y las diferentes aportaciones técnicas como los trabajos de metal, la introducción del papel en Occidente, textiles, tecnología militar, cerámica, vidrio y música, destacando algunos instrumentos musicales introducidos en Europa por los musulmanes como el laúd, el salterio o el rabel.
El espacio se completa con diferentes elementos interactivos como el ingenio hidráulico ideado por al-Yazari, el uso del Astrolabio o la importancia de las formas geométricas en un módulo que te invitaba a descubrir qué encerraban los mosaicos de la Alhambra.
La visita termina con el módulo de los aromas de al-Andalus, con el que el visitante identifica plantas aromáticas y descubre sus diferentes aplicaciones médicas, farmacológicas y estética.
El conocimiento científico al servicio de la humanidad
Estas disciplinas son un claro testimonio de la colaboración científica entre distintas comunidades, sociedades y religiones que estuvieron influidas por el objetivo de saber y de poder aplicar este conocimiento científico al beneficio de la humanidad. La ciencia árabe se caracterizó, en un primer momento, por su capacidad integradora de los saberes helenísticos, siríacos, sánscritos y persas, entre otros. Pero los científicos árabes no solo fusionaron y transmitieron la ciencia de la antigüedad, sino que también la desarrollaron.
Con la formación de al-Andalus, el nombre que dieron los árabes en la península Ibérica a la zona que permanecía ibajo su control, llegaron los conocimientos científicos procedentes de Oriente y desde aquí hacia el resto de las tierras europeas. Por esta razón, al-Andalus estuvo a la cabeza de la ciencia y el pensamiento medieval y los saberes clásicos se reintrodujeron en Occidente a través de las traducciones del árabe. Científicos andalusíes como el cirujano cordobés al-Zahrawi, más conocido como Abucasis, el astrónomo toledano Azarquiel, el geógrafo Ceuta al-Idrisi, o el agrónomo almeriense Ibn Luyyun, fueron algunas de las figuras destacadas de la ciencia andalusí.