Un suceso insólito que ha despertado el interés de la comunidad científica. El pasado diciembre aparecieron en el puerto de Villajoyosa (Alicante) unos restos óseos de grandes dimensiones, que podrían pertenecer a un animal marino de grandes dimensiones. Ahora, el Centro de Investigación Marina de Santa Pola (CIMAR) de la Universidad de Alicante trata de desvelar el origen de estos restos y conocer a qué gran cetáceo pertenecieron.
En la mañana del día 8 de diciembre, la Guardia Civil recibió información sobre la aparición unos restos óseos, al parecer de un gran animal marino, en el puerto de Villajoyosa. Una vez llegados al puerto, los agentes comprobaron que, junto a la gasolinera, habían abandonado los restos óseos de lo que parecía un animal marino de grandes dimensiones. Debido al hallazgo y por su interés científico, los agentes realizaron la puesta en contacto con el Centro de Investigación Marina de Santa Pola.
A qué animal pertenecen los restos óseos aparecidos en el puerto de Villajoyosa
Finalmente, en la mañana del día 22 de diciembre, personal del CIMAR procedió a la retirada y traslado de los restos a sus instalaciones en la localidad de Santa Pola, y comprobaron que efectivamente se trata de los restos óseos de la mandíbula de una ballena, y que quedarán depositados en su centro para el estudio y posterior exposición.
El Centro de Investigación Marina de Santa Pola (CIMAR) es un centro activo, fruto de un convenio entre el Ayuntamiento de Santa Pola y la Universidad de Alicante, donde se llevan a cabo actividades destinadas a conocer un medio tan cercano y a la vez tan desconocido como es el ambiente marino, su biodiversidad y su entorno, para enseñar cómo aprovechar sus recursos de forma responsable y contribuir a proteger este frágil ecosistema, colaborando en su uso racional y ordenación.
Gracias a su trabajo y otros hechos de interés científico, como puede ser el hallazgo de los restos localizados por la Guardia Civil, el CIMAR ha podido publicar la Mini guía de cetáceos en el Sureste peninsular donde además de la información relativa a los cetáceos, se expone una serie de buenas prácticas redactadas para todos los usuarios de la náutica profesional y de recreo, que deben aplicar las medidas del Real Decreto de Protección de Cetáceos (RD 1727/2007) en el que se detalla la manera de proceder para una correcta observación de estos animales. Estas buenas prácticas son: no arrojar alimentos, basuras, sustancias al agua; no producir ruidos fuertes para atraer/alejar; no bañarse o bucear en la zona de exclusión del espacio móvil; la velocidad no puede exceder de 4 nudos, y no interceptar la trayectoria, cortar paso, impedir el movimiento o separar/dispersar el grupo o las crías.
Desde la Guardia Civil recuerdan que si una persona encuentra un cetáceo (vivo o muerto) en la playa o cerca de la costa, hay que llamar siempre al 112 para que puedan proceder a atender a los animales y/o de tomar datos de los varamientos.