La Universidad de Granada continuará con una tercera campaña de trabajos de localización, excavaciones arqueoforenses y exhumaciones de las víctimas asesinadas entre julio y diciembre de 1936 en el Barranco de Víznar y en el cercano paraje de El Caracolar de Alfacar. Los trabajos tendrán una duración de 12 meses.
Tras la firma de una nueva adenda al convenio ya firmado entre la Universidad de Granada y la Consejería de Turismo, Cultura y Deporte de la Junta de Andalucía, un equipo de carácter interdisciplinar formado por arqueólogos, antropólogos físicos y forenses, historiadores y sociólogos, realizará los trabajos de campo y laboratorio con el objetivo de identificar al mayor número posible de cuerpos. Se estima que el número de víctimas objeto de crímenes de lesa humanidad y enterradas en fosas ilegales asciende a entre 280 y 300, entre las que se encuentran profesores de la Universidad de Granada, entre ellos el rector Salvador Vila Hernández, además de hombres y mujeres de diferentes profesiones.
Durante las campañas de 2021 y 2022, se han podido recuperar 49 cuerpos, de los que 20 son de mujeres y el resto de hombres. A todos se les ha realizado el análisis genético para contrastar los resultados con las muestras obtenidas de los familiares que han podido prestarse a ello.
Durante 2023, los trabajos se centrarán en cinco nuevas fosas detectadas el año anterior, algunas de ellas de grandes dimensiones. La apuesta de la Universidad de Granada por recuperar la memoria olvidada de aquellos años de terror, en los que se produjo el golpe de Estado a la II República Española, la posguerra y la dictadura franquista, es patente. La UGR apoya la investigación y homenajea a aquellas personas objeto de la represión fascista durante los años de la dictadura.