Vinculado al mundo audiovisual desde hace casi veinte años, un enamorado del cine y responsable de la formación de profesionales en el sector, Luis Serrano toma ahora las riendas de Almería en Corto, un reto para él y también una enorme responsabilidad para una persona acostumbrada a la presión. En esta entrevista adelanta cómo será la próxima edición del Festival Internacional de Cortometrajes Almería en Corto, la primera bajo su dirección.
¿Qué supone asumir la dirección de Almería en Corto?
Supone mucha responsabilidad; estamos hablando de un festival con carácter internacional y con unas normas de estilo muy definidas, que se deben cumplir al cien por cien. Es un salto importante en mi carrera que me enfrenta a un reto diferente, alejado de lo que había hecho hasta ahora como el festival Cuéntalo en 90 Segundos.
¿Qué cambios espera llevar a cabo durante su dirección?
De momento está todo en el aire, no hay nada concreto. De hecho mantenemos una reunión semanal todas las partes implicadas en el Festival para ir perfilando la próxima edición. La promoción, la organización, las secciones… todo se está definiendo ahora mismo, así que aún no puedo darte una respuesta concreta a esta pregunta.
Pero suponemos que se notará la mano de Luis Serrano, ¿no?
No se trata de dar un giro de 360 grados al Festival, hay una doctrina de trabajo bien definida. Lo que sí pretendo es ceñirme lo más escrupulosamente posible al presupuesto del que dispone el Festival, que ya es muy ajustado, mirando por cada uno de los euros disponibles.
Por otro, me gustaría implicar a todos en este Festival. Los estudiantes de cine deben tener un papel dentro de Almería en Corto, ya sea participando, colaborando o presentando ideas. Almería en Corto no puede dejar a nadie fuera y ésa es una de las nuevas ideas que estamos incorporando para la edición del próximo diciembre.
¿Hay alguna posibilidad de vincular Almería en Corto y Cuéntalo en 90 Segundos?
En un principio, la idea es que Cuéntalo en 90 Segundos esté integrado en el Festival como una de sus actividades paralelas, pero no está todavía definido. El problema es que ambos festivales son muy diferentes entre sí; mientras que en Almería en Corto hay unas exigencias claras en cuanto a la calidad, que nos acercan al sector profesional del cine, el Cuéntalo en 90 Segundos da cabida a la creación amateur, realizada con muy pocos recursos y para la que no hay ninguna exigencia en cuanto a formato, ya que la idea es abrirlo tanto para que nadie se quede sin participar por falta de medios. Combinar estas dos filosofía de trabajo no es nada fácil y hay que perfilarlo mucho.
Los festivales como Almería en Corto viven gracias a las ayudas públicas, ¿no hay posibilidad de financiación privada?
En eso también trabajamos. Es importante que las empresas privadas apoyen iniciativas como ésta, que aportan mucho a la ciudad de Almería. Las empresas tienen que pensar que la industria cultural funciona como un reclamo turístico y apoyar al Festival es hacerlo también a este sector. Sólo tenemos que ver qué pasa en Málaga, San Sebastián o Cannes, cuyos festivales de cine se han convertido en unos de sus acontecimientos culturales más importantes y capaces de atraer a muchos visitantes en esa época. En el fondo, también es ése el objetivo de Almería en Corto, fomentar el papel de Almería como una tierra de cine.
¿Y se piensa en incorporar los largos al Festival?
De momento nos quedamos en los cortos, es parte de la filosofía de este Festival. Sí es cierto que en esta edición habrá proyecciones de largos, pero no tendrán un papel protagonista. De la misma manera que te digo esto, también veo posible que en un futuro próximo haya un acercamiento más serio al largo, con la incorporación de películas a concurso, lo que ocurre es que esto requiere un esfuerzo presupuestario realmente fuerte, que ahora nos planteamos, ya que nuestro objetivo ahora es la actual edición de Almería en Corto.
Entrevista publicada en el número 81 de Nova Ciencia.