Un equipo de la UMU pone en marcha una red de 5G en el Campus del Espinardo, para que empresas y servicios de emergencia prueben sus aplicaciones y las ajusten a esta tecnología.
La red 5G va a multiplicar las posibilidades que hoy día ofrecen las comunicaciones móviles. Su implantación hará mucho más seguro al vehículo autónomo. Acabará con el problema que hoy día se da en grandes concentraciones, como partidos de fútbol o festivales de música, en los que se llega a saturar la red o va a multiplicar la capacidad de los sistemas de Internet de las Cosas.
Sin duda va a ser la tecnología con la que se afianzará todavía más la sociedad digital y las soluciones tecnológicas, basadas en los sistemas de comunicación.
Experimentos con una red de pruebas de 5G
Sin embargo, aunque hay avances muy destacados en este sentido, todavía se trata de una tecnología poco madura, para cuya consolidación se necesita experimentar en situaciones muy parecidas a las reales, o con redes controladas, observadas muy de cerca por los investigadores, encargados de pulir las imperfecciones detectadas en su funcionamiento.
Esto mismo es lo que está haciendo el Grupo de Investigación de Sistemas Inteligentes y Telemática, de la Universidad de Murcia. Estos investigadores participan en un proyecto europeo, que les ha permitido crear una red 5G de carácter experimental en el campus de la Universidad de Murcia, abierta a un conjunto de empresas, con el objetivo de que vayan poniendo a prueba y adaptando sus aplicaciones a este nuevo ecosistema más avanzado, que en unos años será la fórmula habitual en las comunicaciones móviles.
Esta tecnología les está permitiendo alcanzar grandes avances, pero también está poniendo a prueba la capacidad tanto de los investigadores, como de las propias empresas participantes en el proyecto, explica el investigador del grupo, Jorge Gallego Madrid, participante en este proyecto denominado 5GASP, gracias a un contrato predoctoral de la Fundación Séneca, con cargo a las Ayudas para la contratación de investigadores posdoctorales y gestores de la innovación cofinanciadas por Fondo Social Europeo en un 91,89%.
Familiarizarse con la red 5G
“Desde el proyecto les damos soporte para que se familiaricen con la tecnología y pueden adaptar sus aplicaciones dentro de este sistema”, explica.
La tipología de empresas que participa en este experimento es muy variada. Participa una empresa que ha desarrollado un analizador de tráfico de la red, enfocado a la detección de “tráfico malicioso”, cuya eficacia está probando en este ecosistema de red más avanzado. También se han adherido al proyecto un par de aplicaciones destinadas a la geolocalización de vehículos.
En estos casos, la tecnología 5G ha permitido reducir la latencia, es decir, el tiempo entre que se emite la señal y se recibe, algo fundamental en este ámbito. Así, se ha conseguido que los vehículos emiten datos de ubicación y velocidad en tiempo real, una información que será clave de cara a la implantación de la movilidad autónoma.
Seguridad en catástrofes y emergencias
Otra de las líneas de trabajo enmarcadas en este proyecto de investigación está relacionada con la seguridad ante catástrofes. En una situación de ese tipo, las redes de comunicaciones pueden verse afectadas o incluso saturadas.
¿Cómo se podría actuar? Este equipo de la Universidad de Murcia ha conseguido diseñar un sistema que hace posible dar prioridad a determinados usuarios frente al resto.
“Desde el proyecto se pretende que ante cualquier tipo de catástrofe en la que se cae la red, se despliega automáticamente otra, para dar servicio prioritario a los servicios de emergencias. A ellos nunca se les dejaría sin conexión”, afirma Jorge Gallego.
En esta misma línea también se han realizado experimentos con un dron que emite señal de vídeo en tiempo real, en colaboración con el cuerpo de bomberos de Murcia, y que podría emplearse en el seguimiento de incendios, la búsqueda de desaparecidos y el control de la evolución de una riada, por ejemplo.
Con la tecnología 5G se consigue asegurar esa calidad de servicio a los usuarios prioritarios. “Si hay una saturación en la red, podemos priorizar los servicios de emergencias. La tecnología 5G nos da unos mecanismos que nos permiten establecer cierta calidad del servicio y priorizar recursos para ciertas personas o ciertos dispositivos, en este caso los servicios de emergencias, que operarían con la máxima capacidad de la red”.
Diferencias entre el 5G y el 4G
Ahí radica una de las principales diferencias entre la red 4 y 5G, en lo que los especialistas conocen como términos de virtualización de la red, que permite contar con una red mucho más flexible, “aunque sea a nivel virtual”, lo que permite a los técnicos un control más fino de todo el sistema.
“Pasamos de un enfoque más estático a otro mucho más dinámico, que es lo que nos permite esa flexibilidad, para adaptarla a otros usos”, añade este investigador cuyo contrato financia la Fundación Séneca de la Región de Murcia.
Para desplegar esta red de 5G en el campus de la Universidad de Murcia se han instalado dos estaciones base, a través de las que se ofrece servicio inalámbrico. Estas antenas están conectadas por fibra óptica al centro de datos de la Universidad de Murcia, donde este equipo de investigación ha instalado el “core de la red”, es decir, su parte central.
El equipamiento a nivel de campus ha sido posible gracias a la colaboración con la operadora Más Móvil, que les ha cedido una parte del espectro radioeléctrico, para poder usa esa banda de telefonía.
Aparte, disponen de una red de laboratorio, para la que emplean software libre y radios definidas por software, que les permiten emitir en una variedad de bandas, diseñada y fabricada por ellos mismos. Porque uno de los problemas que se están encontrando en este proyecto es la falta de dispositivos disponibles en el mercado adaptados a esta tecnología incipiente.
Para cuando esta tecnología de velocidad ultrarápida de navegación por internet esté implantada en la sociedad las redes 5G deben estar totalmente afinadas, algo de lo que se está encargando este grupo de la Universidad de Murcia.