El festival podrá mantenerse con un tercio del presupuesto de la edición pasada porque la gestión del certamen pasa íntegramente a manos de la Diputación, según informó la diputada de Cultura, María Vázquez. Serán los propios funcionarios de la entidad provincial quienes se hagan cargo del trabajo que conlleva poner en marcha esta cita con los cortometrajes.
Otro punto de ahorro importante es el espacio en el que se va a desarrollar. Con el traslado de la actividad al Auditorio Maestro Padilla, la organización de Almería en Corto se ahorra una cantida importante en concepto de alquiler del Teatro Cervantes. Este cambio de localizción ha sido posible por la colaboración del Ayuntamiento de Almería, que cede el Maestro Padilla de forma gratuita.
Del mismo modo, tampoco se contratará un servicio externo de comunicación para el festival, que el año pasado costó 20.000 euros, y serán los técnicos de Diputación quienes se encarguen de este cometido.
Otra de las grandes novedades del certamen es que sólo habrá un formato de proyección, el vídeo digital en alta definición (HD). Las bases del festival se están elaborando durante estos días.