Este mes tiene lugar la conjunción de tres planetas del Sistema Solar, Júpiter, Saturno y La Tierra, es decir, los tres se situarán aproximadamente en línea recta. Siendo La Tierra el más cercano al Sol de los tres, eso quiere decir que podremos mirar a Júpiter y Saturno muy próximos en el cielo. La separación entre ambos será de apenas 0.1 grados, que equivale aproximadamente a la quinta parte del diámetro aparente de la Luna llena.
Esta cercanía aparente entre Júpiter y Saturno no ocurría desde hace 400 años, y no se volverá a producir hasta marzo de 2080. Estos dos planetas gigantes son dos de los objetos más brillantes del cielo nocturno y tenerlos tan cerca entre sí (aparentemente) será una excelente ocasión para disfrutar del cielo de invierno.
Conjunción planetaria
La conjunción planetaria es una buena excusa para fomentar la observación del cielo nocturno y los bellos espectáculos naturales que nos brinda, y diferentes organizaciones internacionales y nacionales se han organizado para comunicar al público su entusiasmo por la observación astronómica. A nivel internacional y desde la Sociedad Europlanet, Ricardo Hueso (Universidad del País Vasco), y Miguel Angel López Valverde (Instituto de Astrofísica de Andalucía, IAA-CSIC), quieren aprovechar esta ocasión para impulsar la divulgación de las ciencias planetarias y poner en contacto a astrónomos aficionados y profesionales.
“La conjunción entre Júpiter y Saturno se producirá al anochecer de mediados de diciembre y culminará con el máximo acercamiento la noche del 21 de diciembre con Júpiter y Saturno bajos sobre el horizonte de invierno. La mayor parte de los telescopios profesionales tienen dificultades para apuntar a objetos de baja elevación y por eso la observación con pequeños telescopios, más versátiles, promete ofrecer las mejores imágenes de este evento”, apuntan los investigadores.
Iñaki Ordóñez y Ana Ulla, de la Sociedad Española de Astronomía, y Amelia Ortiz, de la Unión Astronómica Internacional, añaden que “aunque desde el punto de vista científico no es una ocasión especial que permita hacer un descubrimiento, para aficionados y el público general será una magnífica ocasión para admirar estos dos planetas, ya que ambos, sus satélites y sus anillos serán visibles simultáneamente cuando se observen a través de un telescopio por modesto que sea su tamaño”.
Desde la Federación de Asociaciones Astronómicas de España (FAAE), Blanca Troughton anima a todas la asociaciones y grupos de aficionados a disfrutar y fotografiar el evento. Aunque el máximo será el día 21, el acercamiento puede observarse ya en el cielo, mirando al horizonte en dirección oeste justo después del atardecer.
Desde Astrónomos Sin Fronteras (ASF), Victoriano Canales señala que este es un evento observable desde casi cualquier lugar de nuestro planeta. “Esto no es un evento puntual; podremos apreciar cómo se van acercando los planetas entre sí, aunque las distancias entre nosotros y Júpiter y Saturno son, respectivamente, de 900 y 1600 millones de kilómetros. Esperamos recibir imágenes de observatorios y aficionados de todo el mundo en torno a los días de mayor acercamiento, entre el 17 y el 26 de diciembre. Animamos a todos a que nos envíen las suyas”.
Las cinco organizaciones han desarrollado una página web coordinada por Joaquín Álvaro de la Agrupación Astronómica de Cuenca. En ella se explica qué es una conjunción, ofrecen consejos de observación y de astrofotografía de planetas en general y de esta conjunción en particular. También anunciarán las actividades que se van programando en diversos planetarios y centros del país, incluyendo retransmisiones en vivo del evento, se responderán preguntas y se compartirán imágenes.
Júpiter, Saturno y sus fascinantes satélites
Quienes dispongan de un pequeño telescopio poseen una herramienta más potente que la que usó Galileo hace 400 años, cuando apuntó su rudimentario telescopio a Júpiter y realizó uno de los descubrimientos clave de la historia de la astronomía: cuatro puntos muy cerca de Júpiter giraban en torno a él. Acababa de descubrir los satélites galileanos, Ganímedes, Calisto, Europa e Ío. Ese descubrimiento supuso el despegue de la revolución científica y la demostración de que el universo no gira alrededor de la Tierra. Hoy día se conocen unos 80 satélites alrededor de Júpiter y otros tantos alrededor de Saturno.
A lo largo de este mes, con la ayuda de un telescopio pequeño se podrá repetir el trabajo de Galileo, es decir, seguir el movimiento de los cuatro satélites galileanos observándolos con continuidad un día tras otro para intentar determinar su periodo orbital, o la duración de su rotación alrededor de Júpiter.