La Junta libera un ejemplar de esta especie en peligro de extinción en una nueva zona de colonización en la provincia de Granada
El director general de Medio Natural, Biodiversidad y Espacios Protegidos de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, Ángel Sánchez, ha participado hoy en la liberación de un joven águila imperial en la provincia de Granada, continuando con la exitosa estrategia de colonización de nuevas zonas de Andalucía.
La Consejería ha conseguido un registro histórico de estos ejemplares, con 123 parejas reproductoras en Andalucía en 2020. Esta cifra supone un crecimiento de 7 parejas frente a las 116 del año anterior (+6%), en el que ya se había registrado igualmente un récord histórico. De hecho, se ha superado el objetivo perseguido por el Plan de Recuperación del Águila Imperial Ibérica en Andalucía, fijado en 100 parejas, el 20% de la población ibérica (500 parejas aproximadamente) conforme a los criterios de las Directivas Hábitat y Aves de la Unión Europea.
La especie ha crecido fundamentalmente en Sierra Morena con 103 parejas, ocho más que el año pasado. También en Cádiz hay un significativo incremento, pues se pasa de 4 parejas localizadas en los últimos años a 6.
La Junta de Andalucía cuenta con un equipo de seguimiento especializado para mantener esta positiva tendencia de la especie. Este equipo se encarga de firmar convenios con propietarios de fincas con presencia de águilas imperiales. Igualmente, trabaja en la reducción de las causas de mortalidad no natural mediante el arreglo y modificación de tendidos eléctricos peligrosos y la lucha contra el uso ilegal de cebos envenenados.
El incremento del registro se debe también a la aplicación de alimentación suplementaria en aquellos territorios poco productivos y el rescate de pollos con poca viabilidad para la supervivencia para su posterior reintroducción en el medio natural. Al mismo tiempo, se ha creado una nueva población reproductora en Cádiz y se han reforzando los núcleos de la Subbética y Doñana. El Plan de recuperación centra ahora sus esfuerzos, de cara a los próximos años, en la consolidación de los núcleos periféricos de Doñana, las Béticas y Cádiz, así como a la colonización natural de las campiñas andaluzas.
A pesar de las limitaciones impuestas por la COVID-19, en 2020 se ha conseguido reforzar los núcleos de Doñana y las Béticas con pollos procedentes de Sierra Morena. Todos ellos han sido equipados con emisores GPS que permiten conocer sus movimientos, detectar zonas de mortalidad no natural y futuras zonas de reproducción.
Los trabajos realizados en Andalucía tienen también incidencia en otros territorios, pues ya hay ejemplares jóvenes de 2020 volando por los cielos madrileños y uno procedente de Doñana se ha dispersado por el norte de África, atravesando Marruecos, donde se colabora con proyectos para la atenuación de amenazas como tendidos eléctricos peligrosos, hasta llegar a Mauritania.
De Córdoba a Granada
El ejemplar liberado hoy en la provincia de Granada es un águila imperial joven localizado el pasado mes de julio en Conquista (Córdoba). Pertenecía a un nido cercano a su lugar de captura que se había desplomado del árbol donde se ubicaba. Los agentes de Medio Ambiente lo trasladaron al Centro de Recuperación de Fauna de Los Villares, donde “se confirmó que era un pollo cercano a la edad de vuelo que se encontraba desnutrido, aunque sin lesiones”, ha detallado Ángel Sánchez. “Pasadas unas semanas tenía ya su peso normal y era capaz de volar y cazar -ha añadido- y como paso previo a su liberación ha sido anillado y equipado con un emisor GPS por parte del personal de la Estación Biológica de Doñana, de forma que se puedan seguir todos sus movimientos en libertad”.
Córdoba cuenta con una población sana y en crecimiento de águila imperial compuesta por 32 territorios de nidificación, por lo que se ha considerado conveniente liberarlo en la última de las zonas de nueva colonización de la especie en Andalucía, en Granada. El lugar concreto de la liberación ha sido un punto de seguimiento y estudio de rapaces que la asociación Wilder South, entidad colaboradora de la Junta de Andalucía, tiene en la comarca de los Montes Orientales de Granada.
En esta provincia, el águila imperial desapareció como especie nidificante hace casi un siglo, pero desde 2017 se ha conseguido observar el asentamiento de una pareja con comportamiento territorial, si bien se trataba aún de individuos no adultos y, por tanto, con pocas posibilidades de reproducirse. Como medida de conservación prioritaria se inventariaron decenas de apoyos eléctricos potencialmente peligrosos para las águilas y muchos de ellos se corrigieron. También se establecieron canales de comunicación con los gestores cinegéticos de la zona y se instaló un nido artificial para incentivar que las águilas se reprodujeran. Como fruto de todo este trabajo son ya tres las parejas de águila imperial que hay en Granada, una de ellas se ha reproducido durante tres años consecutivos.