La calidad del agua es un asunto prioritario en la cuenca mediterránea. El escenario de cambio climático que llevará, previsiblemente, a una alteración de los ciclos y eventos de precipitación (en intensidad y frecuencia) y un aumento de la temperatura media va a propiciar que se reduzcan las reservas de agua para consumo humano y agroganadero.
Para la conservación de la calidad de los recursos disponibles, la Unión Europea cuenta con la Directiva Marco del Agua (DMA), un marco normativo en el que se regulan los aspectos relacionados con el agua. Sin embargo, su aplicación requiere unos conocimientos tan específicos y avanzados que resulta complicado encontrar especialistas con la preparación adecuada para llevarlos a cabo.
Conocimientos en calidad del agua
Hay que conocer aspectos físicos y químicos del agua, identificar una serie grupos biológicos que funcionen como bioindicadores de la calidad de las aguas. Y, también, dominar un instrumental específico, cuyo manejo es complejo y exigen un cierto nivel de experiencia para sacarle todo el partido posible.
Esto lo sabe bien la catedrática de Ecología de la Universidad de Granada, Carmen Pérez, que también imparte clases en el Máster en Técnicas y Ciencias de la Calidad del Agua (IDEA). Esta experta entiende que hay una gran oportunidad de empleo en este campo, porque, asegura, realmente cuesta trabajo encontrar personas con la preparación adecuada para realizar este tipo de análisis.
“Expertos para la toma de muestra y los análisis físico-químicos del agua sí que hay, pero no tanto expertos en los grupos biológicos, que sepan identificar las diatomeas, fitoplancton, plantas acuáticas o los macroinvertebrados, porque conocer a todos los grupos de especies implica mucho tiempo, y en verdad hay muchas especies”, dice Carmen Pérez.
Formación muy específica en calidad del agua
Resulta complicado adquirir la formación adecuada para realizar estos trabajos, si no es de la mano de especialistas muy avanzados o de grupos de investigación con una trayectoria prolongada en este ámbito. Sin embargo, hay una manera más directa para formarse en este campo.
El Máster en Técnicas y Ciencias de la Calidad del Agua, impartido por la Universidad de Granada, ofrece una base sólida para la formación de este tipo de especialistas. Es cierto que en un programa de un año, y con tantos contenidos, no se puede profundizar en algunos aspectos. Aun así, la formación ofrecida en la aplicación de la DMA resulta especialmente atractiva.
Ampliar conocimientos con el Trabajo Fin de Máster
“En el máster se da una base fuerte en este ámbito, y luego pueden adquirir una especialización mayor a través de su trabajo fin de máster y las prácticas de investigación o empresas”, opina Carmen Pérez.
Los especialistas en calidad de aguas y aplicación de la DMA deben conocer “desde cómo planificar un muestreo hasta cómo hacer la toma de muestras, los aparatos que se necesitan, cómo conservar las muestras, cómo analizarlas, presentar los resultados, clasificación taxonómica…”.
El alumnado del máster IDEA trabaja todos estos aspectos y, además, de la mano de especialistas y empresas de primer nivel, con mucha experiencia en calidad de aguas y en la normativa DMA.