Gerard Descarrega (Reus, 1994), ganador del oro en los Juegos Paralímpicos de Río 16, se ha graduado en Psicología por la Universidad Católica de Murcia (UCAM). En lugar de una medalla, esta vez ha recibido la beca morada, el color de su titulación, y el diploma. Son los símbolos de varios años de esfuerzo y sacrificio por tener que compaginar sus entrenamientos, viajes y competiciones con los apuntes, las prácticas y los exámenes. Todo ello, arañando horas al reloj y superando las barreras que la ceguera le imponen, pero que en ningún momento le ha impedido sacarse su carrera y seguir siendo deportista de alto nivel.
Igual que en Río 16, ahora en la UCAM, Descarrega vuelve a disfrutar de la sensación de haber conseguido el éxito: “Es diferente, porque en el deporte puedes esforzarte al máximo y al final te puede ganar otro. En los estudios si te esfuerzas al máximo, eres tú el que saca los resultados. Ambos éxitos son un orgullo, pero las sensaciones son diferentes”. Lo que sí tiene claro el atleta es que el trabajo que realiza la Universidad Católica ha sido clave en la oportunidad que ha tenido: “Estoy muy agradecido a la UCAM y a su profesorado. Es un placer formar parte de esta universidad, porque me ha dado la oportunidad de compaginar mi carrera deportiva con los estudios de Psicología”.
Agradece la labor de Juan Flores, su tutor deportivo: “Ha sido clave, porque me ha ayudado a organizarme a contactar con todos los profesores y a adaptar mucho material, ya que he sido de los primeros alumnos ciegos de esta carrera, y había mucho material que tenía imágenes en texto que no es compatible con el ordenador adaptado que yo utilizo. Juan ha sido mi nexo con la titulación y con el que he estado más en contacto. Medio título se lo debo a él”.
Y precisamente ahora, como si de un entrenador se tratara, toca hablar con su tutor para planificar el siguiente reto académico, “ya que quiero realizar un máster. Mi carrera deportiva continúa y quiero seguir aprovechando esta oportunidad que me da la UCAM para formarme”. La formación y la especialización son fundamentales para tener más oportunidades en el mercado laboral, y Gerard ya está barajando sus preferencias: “Tengo varias opciones. Me gusta la psicología deportiva, ya que el deporte es el ámbito que mejor conozco, pero también me interesa la psicología clínica. Son dos mundos totalmente diferentes, por lo que todavía tengo que pensar mucho por dónde me aventuro”.
Mientras se decide, en el horizonte se dibuja su próximo gran desafío deportivo, Tokio 2020: “Tenemos el Campeonato del Mundo en noviembre, en Dubái, y allí ya podremos clasificarnos para los Juegos, que es el gran objetivo. Es la competición más importante y sólo se disputa cada cuatro años, por lo que ya tenemos muchas ganas de volver a luchar por el oro paralímpico”.