Junta de Andalucía y Universidad de Córdoba analizarán más de cien áreas para definir su hábitat actual y potencial teniendo en cuenta la acción del cambio climático
La consejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, Carmen Crespo, ha firmado esta mañana un convenio con la Universidad de Córdoba (UCO) para la protección y preservación del pinsapo, una especie de abeto andaluz en peligro de extinción. En concreto van a analizar más de cien áreas para definir tanto su hábitat natural como potenciales zonas de implantación a través de la reforestación.
Carmen Crespo y el rector de la Universidad de Córdoba, José Carlos, Gómez Villamandos, han sido los encargados de firmar el acuerdo de colaboración para proteger los pinsapares de la comunidad autónoma en la sede de la institución universitaria. La consejera ha destacado el “vínculo muy especial” existente entre la Consejería y la UCO tanto en asuntos medioambientales como en materia agraria. En este sentido, cabe destacar otros campos en los que están trabajando de la mano, como es el caso de la monitorización de la Política Agraria Común (PAC), la investigación del olivar o de la zoonosis.
Respecto al convenio de colaboración para la protección del pinsapar, los trabajos se van a llevar a cabo en Sierra de las Nieves, Sierra Bermeja, Sierra de Grazalema y sus zonas de influencia. El acuerdo va a permitir generar una cartografía actualizada de los pinsapares andaluces, definir su hábitat paramétrico, estudiar la respuesta de esta especie a la variación climática en los últimos 62 años, así como generar modelos de predicción de su hábitat mediante algoritmos BioMod en diferentes escenarios de cambio climático.
El objetivo de la firma del convenio y de su desarrollo, como ha explicado Carmen Crespo, pasa por “definir el hábitat actual y el potencial del pinsapo, desarrollar medidas de reforestación, recuperación y conexión de zonas potencialmente aptas para esta especie de abeto, además de adelantarse a los diferentes escenarios de cambio climático y aplicar los resultados al Plan de Recuperación del Pinsapo”.
La consejera ha puesto en valor que “el estudio va a suponer el conocimiento de al menos cien localizaciones singulares de pinsapo y conocer su hábitat potencial óptimo”, así como los cambios que se prevén en escenarios a lo largo del presente siglo.
Carmen Crespo ha subrayado que “entendemos la biodiversidad como algo a preservar para generaciones futuras y, a la vez, como un reclamo que genera turismo sostenible, de calidad, que ayuda a atraer talento y fijar la población en el medio rural”.
El estudio será llevado a cabo por el Grupo de investigación “Evaluación y Restauración de Sistemas Agrícolas y Forestales- PAIDI-RNM 360” de la Universidad de Córdoba, dirigido por el Rafael María Navarro Cerrillo. Este grupo, tal y como ha explicado el rector de la UCO, José Carlos Gómez Villamandos, está especializado en el estudio, predicción de hábitat y adaptación al cambio climático de sistemas forestales mediterráneos.
Cuenta con una amplia experiencia en investigaciones sobre estos temas, al haber desarrollado proyectos de investigación con resultados de gran interés que han dado lugar a más de 100 publicaciones sobre ecofisiología forestal, modelos de hábitat, aplicación de sensores al seguimiento de sistemas forestales y actuaciones de restauración en ecosistemas degradados y bajo riesgo climático, la mayoría de ellas generadas en proyectos desarrollados mediante convenios con la consejería competente en materias de medio ambiente así como estudios proyectos nacionales e internacionales.
Carmen Crespo ha destacado que, “una vez más, la Universidad de Córdoba es pionera y nos ayuda a la Consejería de Desarrollo Sostenible a continuar con una labor tan necesaria como es la de mejorar nuestra biodiversidad, adaptarnos a los nuevos tiempos y condiciones climáticas, todo ello para poner en marcha las medidas necesarias para proteger y preservar nuestro medio natural para el futuro”.