Nuevas variedades de manzanas y peras resistentes a climas cálidos

El centro de Pomáceas de la Universidad de Talca de Chile lidera un proyecto internacional que busca hacer frente a las pérdidas que ha vivido la industria en consecuencia al cambio climático 

Inviernos más cálidos, eventos meteorológicos extremos y altas temperaturas han tenido un gran impacto en la producción y calidad de la manzanas y peras en Chile.   

Para enfrentar los nuevos desafíos que impone el cambio climático a este sector, el Centro de Pomáceas de la Universidad de Talca y Andes New Varieties Administration (A.N.A – Chile), presentaron en el marco de la décima versión de la Pomaexpo el “Hot Climate Programme”, iniciativa -única en Latinoamérica- que busca brindar a los productores nuevas variedades de manzanas y peras, resistentes a climas más cálidos. 

Esta labor se une al Programa de Mejoramiento Genético del Manzano, que el Centro de Pomáceas lidera junto A.N.A Chile y que actualmente cuenta con el apoyo de CORFO a través del Consorcio Biofrutales. 

El académico y director del Centro de Pomáceas, José Antonio Yuri, explicó que “se busca acompañar a la industria en el mejoramiento genético, que es un proceso costoso y de tan largo plazo”. 

Objetivos 

El gerente general de A.N.A Chile, Luis Fernández, detalló las expectativas y alcances del nuevo programa.  “Más que la falta de agua, la idea es tener variedad de especies que sean tolerantes a las altas temperaturas, capaces de colorear bajo condiciones muy frías y que no se quemen por la intensa radiación. Esos son los objetivos y ya estamos evaluando estas variedades, en bajo condiciones semi comerciales. Incluso las hemos mandado al extranjero para que se prueben en otras industrias”. 

Este proyecto cuenta con la participación de Venture Fruit de Nueva Zelanda, empresa líder mundial en la creación de nuevas variedades frutales. Gary Wellwood, gerente de desarrollo de esta corporación, explicó que “lo que se espera es que estas nuevas variedades puedan reemplazar y ayudar a las que ya existen y que se puedan seguir creando especies, que tengan la misma coloración y el mismo sabor, a pesar de las condiciones extremas que existen en Chile”.