El uso de estos productos se ha popularizado mucho entre los jóvenes y son vendidos como una alternativa «sana» al tabaco. Dos investigadores de la Universidad de Granada (UGR), Pedro J. Romero Palacios y Jesús Torres Medina, han analizado los efectos nocivos de estos productos y en este artículo te vamos a contar sus conclusiones
La UGR, como parte de la Red Española de Universidades Promotoras de Salud (REUPS), impulsa dentro de la tercera edición de la iniciativa «Un mensaje saludable por un objetivo común» que en este mes de mayo invita a reflexionar sobre los cigarrillos electrónicos y las cachimbas.
Médico especialista en Neumología, el Dr. Pedro J. Romero es profesor e investigador en el Departamento de Medicina de la Facultad de Medicina de la UGR y es miembro del grupo de investigación Biopsia Líquida e intercepción del cáncer. Por su parte, el Dr Jesús Torres Medina es graduado en Medicina por la Universidad de Granada. Ambos forman parte del equipo del Proyecto de Investigación “Salud Respiratoria” de la Universidad de Granada.
¿Es perjudicial el uso de la cachimba y del cigarrillo electrónico?
Por supuesto que sí, el uso de los dos productos es dañino para la salud. Estas nuevas formas de fumar tabaco se están popularizando rápidamente entre los más jóvenes bajo la idea de que son inofensivas para la salud. Todo lo contrario.
Hay que abandonar las falsas creencias en torno a estos nuevos productos. El humo de la cachimba y del cigarrillo electrónico contiene sustancias tóxicas y cancerígenas que ya estaban presentes en los cigarrillos convencionales de tabaco.
Por un lado, la cachimba puede ser tan perjudicial como fumar cigarrillos. Incluso algunos componentes tóxicos se encuentran en mayor cantidad. De hecho, una sesión de cachimba produce tanto humo como 100 cigarrillos, y además contiene mayor cantidad de metales pesados, nicotina, alquitrán y monóxido de carbono. En contra de la creencia popular, el agua de la cachimba no filtra esos químicos dañinos, sino que incluso puede crear partículas ultra-pequeñas que alcanzan directamente la parte más profunda del pulmón.
Estas son las enfermedades relacionadas con el uso de vapeadores y cachimbas
Entre otras enfermedades, se conoce la relación del uso de la cachimba con el cáncer de pulmón, EPOC (Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica), enfermedades cardiovasculares y numerosos casos de intoxicación grave por el monóxido de carbono, gas tóxico que también generan los vehículos y los incendios.
En ocasiones, las personas que usan la cachimba no atribuyen los síntomas de esta intoxicación (tales como dolor de cabeza, pérdida del conocimiento…) a su consumo, sino al consumo de otras drogas (alcohol u otras drogas ilegales), retrasándose su diagnóstico y tratamiento.
En relación con el cigarrillo electrónico, hay que aclarar que también es dañino para la salud. Se ha tratado de vender a la sociedad como una alternativa saludable al cigarrillo convencional, pero contiene sustancias que causan daño pulmonar y adicción. Lo natural es no fumar. Su aerosol contiene metales pesados y sustancias cancerígenas como nitrosaminas, aldehídos, compuestos orgánicos volátiles e hidrocarburos aromáticos policíclicos.
Además del daño pulmonar descrito, otro riesgo asociado al cigarrillo electrónico es el de las grandes quemaduras producidas con bastante frecuencia por la explosión de la batería de estos dispositivos.
Al igual que los cigarrillos de tabaco, la cachimba y el cigarrillo electrónico pueden ser adictivos al usarse con nicotina. Pueden considerarse como una vía de mantenimiento de la adicción a la nicotina y acabar finalmente por consumir ambos productos, cigarrillos de tabaco y vapores. Por este motivo, lejos de lo que comúnmente se piensa, el cigarrillo electrónico no ayuda a dejar de fumar.
Cigarrillos electrónicos y cachimbas, tan perjudiciales como el tabaco normal
El humo de la cachimba y del cigarrillo electrónico es tan perjudicial para las personas que están fumando como para las que no pero que lo inhalan al compartir el mismo espacio (fumadores pasivos). Se debe tener especial cuidado de utilizarlos en presencia de niños y mujeres embarazadas.
Al igual que los cigarrillos de tabaco, el uso de estas nuevas formas de fumar también es perjudicial para la salud y suponen una importante puerta de entrada a la adicción al tabaquismo, principal causa de enfermedad, invalidez y muerte evitable en el mundo, por la nicotina que con frecuencia contienen. Recuerda, el tabaco mata y lo hace en todas sus formas.