Los peligros del Guadalmedina, a estudio en el último título de UMA Editorial

Ocho investigadores de la Universidad de Málaga (UMA) analizan la susceptibilidad del territorio de la cuenca hidrográfica del río Guadalmedina (Málaga) frente a los procesos erosivos con el objetivo de crear estrategias destinadas a mejorar la gestión del territorio y reducir los riesgos existentes. Lo hacen en el libro La cuenca del río Guadalmedina: peligrosidad frente a la erosión hídrica, editado por UMA Editorial y coordinado por José Antonio Sillero Medina y José Damián Ruiz Sinoga.

Varios de los investigadores que han participado en la elaboración de este libro.

A pesar de su cariz científico, el libro ha sido realizado para ser accesible a cualquier tipo de público interesado en conocer la situación en este contexto de cambio climático de la cuenca del río malagueño más allá de su entramado urbano en la ciudad. “Está todo muy detallado sin utilizar un lenguaje muy técnico. Los métodos y resultados están expuestos de manera que sean entendibles para cualquier tipo de público, por lo que no sólo tiene esa connotación científica y útil para el gestor”, ha señalado Sillero Medina.

Tras una introducción en la que, de manera general, se afianzan conceptos como el de cambio climático, calidad del suelo, erosión, degradación o desertificación, se procede a determinar el ámbito de estudio desgranando cómo se encuentra la cuenca y sus características principales tales como el relieve, el uso del suelo y cubierta vegetal o la población, entre otros aspectos. A lo largo de las más de 200 páginas de la obra se suceden otros seis capítulos en los que se comienza evaluando la peligrosidad de los procesos de erosión hídrica mediante el análisis de distintas variables territoriales que han permitido delimitar las zonas de actuación prioritaria a nivel de parcela (entendida como unidad catastral).

Posteriormente, se determinan las tasas de erosión del suelo y los factores determinantes de la dinámica paisajística, haciendo hincapié en los hidrológicos. El sexto capítulo se centra en la determinación de la capacidad de emisión de caudales y de transporte de sedimentos en eventos reales acontecidos recientemente. “Damos un paso más utilizando nuevas tecnologías y herramientas innovadoras que han permitido hacer un análisis muy profundo y conseguir llegar hasta los problemas de erosión a nivel parcelario. Hemos analizado 132 muestras de suelo y también hemos utilizado métodos más tradicionales de análisis de peligro de erosión que nos han servido para constatar que ese resultado obtenido de forma directa en el trabajo de campo se corresponde con la realidad analizada en el laboratorio de forma empírica”, ha desarrollado Sillero Medina.

El libro se cierra con un apartado fotográfico que incluye imágenes tomadas durante los trabajos de campo que ha permitido, según han detallado los editores literarios, corroborar visualmente esta problemática; así como con unas consideraciones finales en las que los autores y autoras de la obra valoran los elementos analizados y plantean posibles líneas futuras. De esta manera, concluyen que las problemáticas detectadas “se traducen en espacios con mala conservación de suelos o donde las complejidades del relieve dificultan un correcto desarrollo”. En cuanto a las propuestas de actuación, determinan que “tienen que seguir un proceso coordinado con los propietarios de los terrenos afectados, ya sean públicos o privados, teniendo en cuenta el contexto del entorno y sus habitantes”.

En este sentido, Ruiz Sinoga ha destacado el valor de la obra como herramienta para la Administración Pública: “Sabemos en qué parcelas actuar y dónde se encuentran los mayores peligros y riesgos de erosión; pero el qué hacer le corresponde a la Administración”. De esta manera, se espera que los resultados “puedan dan lugar a la creación de estrategias y medidas concretas para las áreas delimitadas y catalogadas como de mayor peligrosidad”, según se apunta en el cierre del libro.

En este trabajo colectivo ha participado, además de José Antonio Sillero Medina y José Damián Ruiz Sinoga, parte del equipo del Laboratorio de Geomorfología y Suelos de la Universidad de Málaga compuesto por Julia Espinosa Muñoz, Javier González Pérez, Alberto Cantarero Reina, Ana Triano Cornejo, José Miguel Romero Aja y Paloma Hueso González.

En el acto también ha intervenido Rosario Moreno-Torres Sánchez, responsable de UMA Editorial, quien ha destacado el sello de calidad CEA-APQ con el que cuenta la colección Studia Malacitana, en la cual se engloba el título presentado.