Según un ensayo del CSIC, consumir horchata natural produce grandes beneficios en la microbiota intestinal. El cuidado del sistema digestivo es sumamente importante para poseer una buena salud, después del cerebro, concentra el mayor número de conexiones nerviosas.
El CSIC ha demostrado que beber durante tres días un vaso grande de horchata, sin pasteurizar y sin azúcar añadido, basta para modificar los microorganismos del sistema digestivo. Tras la realización del ensayo, la microbiota intestinal cambió en poco tiempo hacia patrones parecidos a los de personas vegetarianas o que siguen una dieta mediterránea, en otras palabras, hacia perfiles más saludables.
Tomar un vaso grande de horchata natural durante tres días basta para producir cambios en la microbiota intestinal asociados a un perfil microbiano más saludable. Así lo han demostrado en el Instituto de Agroquímica y Tecnología de Alimentos (IATA), del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), en un ensayo con 35 personas voluntarias que tomaron 300 mililitros diarios de horchata sin pasteurizar, con todo su almidón y sin azúcar añadido, durante tres días. Los resultados, publicados en la revista científica Nutrients, sugieren que el consumo de este producto tradicional elaborado a partir de la chufa puede mejorar la salud digestiva y el estado general de salud.