Avanzar en el trabajo iniciado hace tres años con la ambición de preparar la Universidad de Oviedo para el futuro. Es el mensaje que ha querido transmitir Ignacio Villaverde, rector de la Universidad de Oviedo, durante la ceremonia de apertura del curso académico 2024-2025. El máximo responsable de la institución académica ha subrayado que el hilo conductor que ha guiado su gestión desde 2021 ha sido el “empeño y preocupación” de su equipo para que la universidad no llegue tarde al siglo XXI. El rector presidió, el viernes, la apertura del año universitario en un acto que tuvo lugar en la Biblioteca Central del Edificio Histórico con la presencia, entre otras autoridades, de Adrián Barbón, presidente del Principado, y Alfredo Canteli, alcalde de Oviedo.
Villaverde, que hizo balance de la gestión de su equipo desde que se hizo cargo del gobierno universitario, destacó que su máxima preocupación es preparar la institución para los próximos años. “Tenemos que decidir entre todos qué universidad queremos ser, a dónde queremos dirigirnos, con el firme propósito de legar una universidad mejor a las generaciones venideras, una universidad a la altura de su tiempo”, ha subrayado el rector.
El máximo responsable de la institución académica comenzó su intervención con un cariñoso agradecimiento a la figura del rector Juan Vázquez, presente en la ceremonia, que, tras 48 años de servicio, este 31 de agosto finalizó su pertenencia administrativa a la universidad. “Gracias rector por tu dedicación y tu legado, seguirás siendo una voz que debe ser escuchada”, ha manifestado.
Aumento del estudiantado
El rector destacó que un buen ejemplo de que la universidad va por el buen camino es la evolución de los datos de matrícula. “Este año, a primeros de septiembre de 2024, volvemos a crecer en 200 estudiantes de grado, de los que más de 4.000 residen fuera de Asturias, duplicando casi la cifra del curso anterior, como casi lo hemos logrado con los más de 1.400 estudiantes extranjeros matriculados en nuestros estudios”. “Estas cifras hablan de nuestra reputación y de nuestra competencia frente a la llegada a Asturias en los próximos años de universidades privadas”, ha enfatizado. A estas alturas del año y con el periodo de matriculación aún abierto, son más de 20.000 los estudiantes inscritos en títulos de grado, máster y doctorado.
Villaverde avanzó que este curso 2024-2025, que ahora comienza, debe centrarse en repensar “nuestra estrategia”. “Nuestra prioridad es el desarrollo de un nuevo modelo docente y de oferta formativa”, dijo. “La Universidad de Oviedo debe reflexionar sobre qué quiere ser como institución docente, sobre cómo queremos enseñar y cómo quiere nuestro estudiantado que les enseñemos”.
También manifestó que durante este año la institución que dirige debe desarrollar el mapa de especialización inteligente y profundizar en sus hubs y culminar la nueva estructura administrativa desarrollando las administraciones de campus. Ha desvelado además el rector que se crearán nuevas unidades administrativas, como las de informática, apoyo a la investigación y comunicación y marketing, y que se reestructurará el servicio de biblioteca para formalizar los nuevos servicios de apoyo a la investigación y la unidad de análisis de datos, y se profesionalizará las direcciones del servicio de informática y de prevención y riesgos laborales. Se comprometió igualmente a continuar lo que ha definido como “batalla interminable” contra la burocracia y el papeleo para lo que se pondrá en marcha un plan de choque aligerando procedimientos y asignando las tareas administrativas de forma clara y precisa para que cada cual haga lo que le corresponde.
Balance de gestión
El rector centró buena parte de su intervención en repasar los logros de la gestión de su equipo que, según dijo, son resultado del esfuerzo de toda la comunidad universitaria. Villaverde recordó que la universidad emprendió, en febrero de 2021, un camino que, en abril de 2024, decidió mayoritariamente seguir, tras los resultados de las elecciones al Rectorado. “La comunidad universitaria asturiana ha otorgado su confianza a un proyecto ambicioso y de largo aliento plasmado en un programa donde se expresaba con claridad qué universidad queríamos”, ha explicado.
De la gestión de 2021, Villaverde destacó el trabajo realizado durante la pandemia, la puesta en marcha del programa de asistencia emocional que ahora llega también al estudiantado, la política de becas y las medidas para el fomento de la participación estudiantil. Ha mencionado también la nueva extensión universitaria con los programas UO Territorio, Cultura Cercana, UO Casa Abierta o Campus Rural, que pretenden llevar la universidad a todos los rincones de Asturias, y los acuerdos con las organizaciones sindicales para la reorganización administrativa de la universidad. Ese mismo año, se diseñaron ya medidas para planificar la plantilla del personal docente y adaptarla a las nuevas necesidades.
“En estos tres años, hemos convocado un total de 579 plazas, de las que 210 lo son en la figura de profesorado ayudante doctor. Si a eso sumamos los actuales 339 contratos predoctorales y de apoyo a los grupos de investigación, casi el 25% de nuestra plantilla académica ya es personal investigador o profesorado en formación dando sus primeros pasos en la carrera académica”, ha manifestado. Tras este proceso, el rector ha resaltado que ha llegado también el momento de establecer un sistema claro y transparente de financiación de las facultades, escuelas, departamentos, institutos y centros de investigación donde se sepa qué se financia y por qué, y se fijen objetivos de gestión.
Del curso 2022-2023, ya con los nuevos planes estratégicos en marcha, Villaverde ha mencionado el diseño del mapa de especialización inteligente, la necesidad de revisar el modelo docente y las bases de la planificación estratégica de la oferta formativa. “Hoy están implantados el grado en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte, el de Criminología, nuestro primer máster dual, cuatro nuevos dobles grados, una reestructuración de la oferta de títulos propios y la puesta en marcha de las microcredenciales”, ha subrayado.
2022 estuvo marcado por una crisis energética y de materias primas sin precedentes y por la necesidad de poner en machar medidas para renovar las infraestructuras. “Proyectos como el desarrollo del Campus de El Cristo en los espacios del antiguo hospital universitario o la ordenación y racionalización de nuestras infraestructuras son indispensables para entender el futuro urbano y estructural de la universidad asturiana”, ha dicho. El rector, que ha pedido ayuda al presidente para acometer estos cambios, ha recordado que la universidad dispone de 58 edificios en cinco campus distintos que requieren intervenciones urgentes. “Necesitamos acordar con el Gobierno asturiano un ambicioso plan plurianual que nos permita poner al día nuestros edificios e instalaciones”, ha manifestado. En este contexto, el rector ha mencionado los avances para llegar a buen término el nuevo Campus de El Cristo. “La universidá tómalu mui en serio y trabayamos de forma coordinada cola Tesorería Xeneral de la Seguridá social y el gobiernu d’Asturies por pone-y el ramu al percomplexu trámite alministrativu de la cesión de los terrenos del antiguu hospital universitariu”, ha matizado el rector, que ha agradecido también el compromiso expresado ayer por la ministra Elma Saiz.
El máximo responsable de la institución académica ha destacado, entre los logros de 2023, la adaptación a la LOSU, la reestructuración del servicio de investigación y el impulso decidido de la actividad investigadora con unos ingresos por investigación y transferencia sin parangón. “Hemos pasado de los 27 millones de 2021 a los 34 millones de 2023. Mérito desde luego de nuestros casi 200 grupos de investigación”, ha indicado. El pasado fue también el año de la consolidación de la transferencia universitaria, el año en el que se dio impulso al emprendimiento universitario y en el que marcas como TalentUO o el Foro de Empleo han alcanzado su mayor tasa de éxito.
Del año universitario que ahora concluye, Villaverde se ha detenido en la aprobación de los nuevos Estatutos y en las elecciones al Rectorado y ha reiterado que la prioridad de su equipo sigue siendo el nuevo modelo de docencia que obliga a “reflexionar sobre qué queremos ser como institución docente, sobre cómo queremos enseñar y cómo quiere nuestro estudiantado que les enseñemos”, ha concluido.
Lección inaugural: Los marinos son universidad
Previamente, ha tenido lugar la lección inaugural que, en esta ocasión, ha corrido a cargo de Rubén González Rodríguez, catedrático del Departamento de Ciencia y Tecnología Náutica de la Universidad de Oviedo. El también director de la Escuela Superior de la Marina Civil, en el Campus de Gijón, ha ofrecido la conferencia titulada El convenio STCW. Los marinos son universidad, en la que ha invitado a la audiencia a descubrir la importancia de los profesionales del mar y del transporte marítimo en la economía mundial, y a conocer las peculiaridades de su formación sometida a exigentes normativas internacionales.
González Rodríguez ha señalado, durante su intervención, que los marinos desempeñan un papel crucial en la economía mundial al asegurar el transporte eficiente de bienes y materias primas a través de los océanos. “Representan el pilar del comercio global, ya que aproximadamente el 90% de las mercancías se transportan por vía marítima. Su labor permite el flujo constante de productos esenciales impulsando así el desarrollo económico y la estabilidad de los mercados internacionales. Además, la industria marítima genera millones de empleos directos e indirectos, contribuyendo significativamente al crecimiento económico”, ha destacado.
En este contexto, el catedrático ha hecho hincapié en que el convenio STCW es “fundamental” para asegurar que la gente de mar esté adecuadamente preparada para enfrentar los desafíos del entorno marítimo. “La formación y certificación bajo este convenio no solo mejoran la seguridad y eficiencia operativa, sino que también contribuyen significativamente a la protección del medio ambiente y la sostenibilidad del comercio marítimo global”, ha concluido.
Memoria del curso 2023-2024
Durante el acto de apertura del curso académico, también ha intervenido Ángel Espiniella, secretario general de la Universidad de Oviedo, que, en un discurso en el que ha querido recordar el año Canella que conmemora la universidad, ha aprovechado para presentar los principales datos de la memoria del curso que termina. Espiniella ha destacado que, durante el año 2023-2024, estudiaron en la institución académica 20.683 estudiantes, 17.120 de ellos, de grado. Además, ha ofrecido cifras sobre tesis doctorales leídas (240), movilidades internacionales (955 movilidades salientes y 694 entrantes); nuevas cátedras institucionales o de empresa (10) o proyectos de investigación (124), entre otras muchas.