La actividad ha contado con 51 participantes, con las edades comprendidas entre los 7 y los 16 años. También han participado los padres de los jóvenes alumnos, en una actividad que la dirección de la Escuela Deportiva, que depende del Club de Montañismo Cóndor, denomina ‘montañismo en familia’.
Los alumnos salieron desde la Plaza del Zapillo de Almería a las 9.00 horas, tal y como estaba previsto, y a las 10.30 alcanzaron el cruce del camino principal que baja hasta el refugio. Los últimos 500 metros de descenso los recorrieron andando. En su primera toma de contacto, los participantes se instalaron en los diferentes módulos con los que cuenta el albergue.
La primera actividad que desarrollaron los participantes tras su llegada al Refugio fue la de ‘Conoce tu Entorno’, que consiste en realizar un itinerario en grupos de dos o tres deportistas, con un mapa del lugar y su entorno, pasando por un total de ocho balizas, en el orden en el que se indica. Se les indica inicialmente las coordenadas del primer punto al que tienen que ir y, al llegar a éste, en la baliza, pueden conocer las del siguiente, y así sucesivamente.
Tras el almuerzo, los participantes se dividieron en dos grupos. Los mayores tomaron contacto con la escalada a través de un rapel, en el que descendieron con una cuerda por una pared de roca totalmente vertical. Para conseguirlo, se deslizaron con un descensor llamado ‘8’. Antes de afrontar el ejercicio, los monitores de escalada proporcionaron a los deportistas las nociones básicas de la utilización del material, así como de la técnica para descender.
Los montañeros más jóvenes, mientras, realizaron un itinerario de educación ambiental por un bosque de pinos, observando la diferente vegetación que forma parte del espacio natural de montaña. También desarrollaron una labor de limpieza.
En la modalidad de orientación se utilizó un mapa 1:10.000, con una fase teórica-práctica en la que los participantes conocieron las destrezas básicas de lectura de mapas, conociendo cómo se representa el terreno con curvas de nivel y los diferentes conocimientos, como la equidistancia, la toponimia o los signos convencionales. Los montañeros pudieron cubrir un itinerario interpretativo, comprobando paso a paso las diferentes características del terreno, los barrancos, las curvas del camino o los cortafuegos, entre otros elementos.
El domingo, los participantes realizaron una excursión de 10,5 kilómetros, partiendo del Refugio, de una altura de 1.560 metros, en la que bajaron junto al río, entre la vegetación de esta zona húmeda, muy abundante, como rosales, encinas, pinos, castaños y álamos, entre otros ejemplares. Cruzaron el río en cinco ocasiones, hasta llegar al Cortijo de El Rosal. Volvieron a cruzar el río para dirigirse por una vereda entre roca y densa vegetación, a una pequeña cascada de casi tres metros, llamada ‘El Goterón’. Tomaron, en un recorrido de 300 metros, el camino de vuelta para de nuevo atravesar la corriente de agua y desde el Cortijo El Rosal proseguir a través de una pista forestal que va ascendiendo hasta llegar a la ‘Fuente del Rosal’, la cota más alta a la que ascendieron, con 1.680 metros. La marcha prosiguió hasta retornar al punto inicial, el Refugio de Ubeire.