Más de medio centenar de personas han participado en una jornada sobre la Dactylopius opuntiae, conocida como cochinilla del carmín, en la que los expertos han recomendado actuar en cuanto aparezcan los primeros síntomas de esta plaga.
En la jornada, inaugurada por el Instituto de Investigación y Formación Agraria y Pesquera (IFAPA) de la Junta de Andalucía, los ponentes afirmaron que no existen apenas productos fitosanitarios registrados para tratar la chumbera, lo mejor es actuar con rapidez con la aplicación de jabones suaves, así como con agua a presión, siempre que la plaga no esté muy extendida.
Según los expertos que han participado en la jornada, las plantas muy afectadas son prácticamente irrecuperables por lo que es mejor podar las zonas afectadas y enterrarlas, ya que posteriormente la planta rebrotará. Hay que evitar que la plaga continúe colonizando otras chumberas (es una plaga muy específica del género Opuntias, por lo que no afecta otras especies vegetales).
Asimismo, en la jornada se habló de la necesidad de estudiar una posible revisión del Catálogo de Especies Exóticas Invasoras en las que se haga una diferenciación de la chumbera, ‘Opuntia ficus-indica’, en función de su uso ancestral como alimento, soporte contra la erosión, delimitador de parcelas, o su posible carácter invasivo en zonas con alguna figura de protección ambiental. En Canarias incluso se considera la excepción dentro del Catálogo, al ser considerado como un recurso fitogenético.