Estrategias de gamificación para conseguir éxito en terapias, programas de formación para técnicos especializados, recreación de situaciones conflictivas… o simplemente por el placer de jugar. Málaga asiste al nacimiento de un clúster vinculado a la industria del videojuego, que puede convertir a la capital de la Costa del Sol en uno de los centros más importantes del país, a cuya consolidación contribuye la Universidad de Málaga.
La industria del videojuego facturó en España en 2016 más de 1.100 millones de euros. El ocio digital se ha convertido en una de las opciones preferidas por jóvenes, y no tan jóvenes, para disfrutar de sus momentos libres.
Al mismo tiempo, el mundo de la investigación no acaba de ver las posibilidades de los videojuegos en sectores tan dispares como la formación de trabajadores, la sanidad o la inclusión social, por citar solo tres campos. Todavía son vistos como esos productos pensados solamente para jugar y divertirse.
Ciudades vinculadas a la industria del videojuego
La industria del videojuego es un sector económico con una fuerza innegable, al que cada vez se están sumando más ciudades, que desean ubicarse en el mapa de la producción de productos digitales para esta industria en plena ascensión. Málaga, con su universidad a la cabeza, es un ejemplo de esta reconversión hacia este sector, con la creación de clúster compuesto por empresas tecnológicas emergentes, profesionales de las bellas artes y el diseño, así como expertos de campos tan alejados como el derecho o la gestión empresarial, que están haciendo de la capital de la Costa del Sol un punto de referencia para la industria del ocio digital.
Videojuegos para mucho más que jugar
“Ya hay videojuegos para aprender a debatir, entrenar a cirujanos o manejarse en el mundo de las finanzas”, afirma el investigador del Grupo de Ingeniería del Software y director del Máster en Creación de Videojuegos de la Universidad de Málaga, Antonio Fernández Leiva. Este investigador y también emprendedor en el mundo de los videojuegos a través de una spin off de la UMA, se muestra convencido de que en Málaga se está creando un entorno de profesionales del sector digital que dará mucho que hablar en los próximos años. Se trata de un sector que recoge la tradición tecnológica desarrollada en la propia UMA y que, sin duda, se beneficiará de un entorno industrial volcado con las nuevas tecnologías.
Este sector emergente en Málaga ha recibido un nuevo espaldarazo con la creación del PlayStation Games Camp Andalucía, una incubadora de empresas especializadas en este sector cuyos mejores proyectos serán comercializados por la compañía Sony para su plataforma PS4. Este campus tecnológico se ubicará dentro del Centro Andaluz de Emprendimiento que la Junta de Andalucía creará en la Universidad de Málaga.
Emprendimiento de la mano de PlayStation
Además, también se pondrá en marcha en la capital malagueña, por primera vez en Andalucía, First, una iniciativa de formación de universitarios para la creación de videojuegos, también perteneciente al programa PlayStation Talents.
La propia UMA, en colaboración con el Ayuntamiento de Málaga, va a dar otro impulso al sector, con la creación de la Cátedra de Videojuegos, Gamificación y Juegos Serios, que dirigirá Antonio Fernández Leiva, y que tiene como objetivo investigar en el desarrollo de este tipo de productos no pensados para el ocio digital, como puede ser un videojuego cuyo objetivo sea la formación de los vendedores de una empresa. Del mismo modo, explica Fernández Leiva, la UMA presentará otra cátedra específica del ámbito de los E-sports, otro sector de mucho crecimiento y del que salen figuras capaces de mover a miles de seguidores.
Formación especializada para la industria del videojuego
La Universidad de Málaga ha realizado una apuesta importante por este sector, en principio vinculado al ocio digital, pero que cada vez tiene una penetración más amplia en el conjunto de la sociedad. De ahí se explica la puesta en marcha del Máster en Creación de Videojuegos, también dirigido por Antonio Fernández Leiva, un programa propio del campus malagueño, en el que se forman especialistas en programación y diseño de videojuegos.
“La de este año es la cuarta edición del máster y la práctica totalidad de estudiantes de las tres ediciones anteriores se encuentran trabajando en las principales empresas del sector en este país y también tenemos algunos fuera de España”, asegura el director del máster.
Todo este trabajo para crear una masa crítica capaz de generar un sector potente en el ámbito de la industria digital y hacer de Málaga un punto de referencia en el campo de la creación de videojuegos, al que se unen profesionales de sectores muy diferentes.
Los perfiles de multiplican en la creación de videojuegos
En un principio, cuando se habla del desarrollo de estos productos se piensa tres figuras profesionales encargadas, respectivamente, de la programación, el diseño y la parte artística del juego. Sin embargo, ya no es así. “Ya no hay un solo programador, sino un programador de la inteligencia artificial, otro de las mecánicas, el programador del interfaz, el del juego on line… son perfiles cada vez más especializados. Y con los otros dos perfiles profesionales ocurre prácticamente lo mismo”, explica este investigador de la Universidad de Málaga.
Actualmente, ligados al sector de los videojuegos también trabajan profesionales del derecho, que gestionan asuntos relacionados con los derechos de autor y velan por que el contenido se ajuste a las normativas de los diferentes países en los que se pondrá a la venta. Del mismo modo, el experto en marketing es fundamental en esta industria, y se encarga de diseñar las estrategias de comercialización y de promoción de los títulos en las diferentes plataformas publicitarias. “El videojuego es arte y como tal, también participan guionistas, músicos, expertos en sonorización… es tal la magnitud que puede trabajar cualquier profesional”, sentencia Antonio Fernández Leiva.
Juegos con múltiples aplicaciones
El videojuego está penetrando cada vez en más sectores de la sociedad, y ya no se trata solamente del producto diseñado para el ocio. El sector del ‘videojuego serio’ está experimentando un crecimiento destacado. De ahí que se haya generado una demanda de profesionales especialistas en gamificación, es decir, experto “que sepan gamificar, por ejemplo, el acceso a la banca on line, a través de sistemas de recompensas e incentivos como los que se emplean en el mundo de los videojuegos”.
La investigación en torno al mundo del videojuego que se realiza en la Universidad de Málaga abarca diversos campos. Uno de ellos es la aplicación de técnicas de inteligencia artificial avanzada a estos productos digitales. “Hacemos técnicas que simulan el comportamiento de un jugador humano dentro de un videojuego. Engañamos al oponente humano para hacerle creer que está jugando contra otra persona” explica Antonio Fernández Leiva.
Hay otros grupos de la Universidad de Málaga que emplean los videojuegos para el desarrollo de la tecnología Brain Computer Interface (BCI), que permite dar instrucciones con el pensamiento y que puede tener una importancia destacada en el desarrollo del vehículo autónomo. También hay otros que emplean la realidad aumentada para la experimentación de sus tesis, al tiempo que hay experiencias del uso del videojuego en el tratamiento de personas con autismo y otros problemas de tipo psicológico.
Toda esta investigación y la formación que se ofrece desde la Universidad de Málaga está contribuyendo a que esta ciudad entre en el mapa de los focos de producción de videojuegos con voz propia. Y, de la misma manera, supone un espaldarazo más al sector tecnológico de esta provincia, que cada vez tiene más presencia internacional.