El informe de la OCDE titulado Estudiantes de bajo rendimiento: Por qué se quedan atrás y cómo ayudarles a tener éxito, que se ha publicado hoy, analiza a los alumnos que no alcanzan un nivel básico de conocimientos en matemáticas, lectura o ciencia.
Destacamos algunas valoraciones del informe:
- En total, 13 millones de estudiantes de 15 años de 64 países (según el informe PISA de 2012) están insertos en un círculo vicioso de bajo rendimiento y desmotivación que frecuentemente lleva a malas calificaciones y a un abandono temprano del sistema escolar, y que en España afectaría a uno de cada cuatro escolares de esa edad.
- El 40% de los estudiantes de familias desfavorecidas en España tuvo un bajo rendimiento en matemáticas en 2012.
- Asignaturas de bajo rendimiento. En el caso de España, según el último informe PISA (2012), el 24% de los estudiantes tuvo un bajo rendimiento en matemáticas (algo superior a la media de la OCDE, 23%), un 18% en lectura (igual que la OCDE), y un 16% en ciencias (frente al 18% de la OCDE).
- En general, las cifras de bajo rendimiento son peores en hombres que en mujeres. El 14% de los chicos muestra bajo rendimiento en las tres materias, frente al 9% de las chicas.
- La ausencia de educación preescolar es un importante predictor de bajo rendimiento.
- Repetición de curso. En el caso de España, el 52% de los estudiantes que han repetido curso muestran bajo rendimiento, y tienen una probabilidad 8,4 veces mayor de registrarlo que los alumnos que nunca han repetido curso (9%)
- Absentismo escolar. En 2012, un 43% de los estudiantes de bajo rendimiento en matemáticas en España perdió un día entero de colegio al menos una vez (la media en la OCDE es del 23%).
- Deberes. Los estudiantes españoles con bajo rendimiento dedicaron más tiempo a las tareas escolares en casa que los del resto de países.
Este informe hace referencia a una serie de datos y conclusiones sobre las que ANPE viene exigiendo soluciones desde hace mucho tiempo:
- La OCDE incide en que no se trata solo de aumentar el gasto en educación para conseguir un mayor rendimiento en los alumnos, lo que marca la diferencia es también el cómo y cuándo se realiza el gasto. España viene invirtiendo una media del 1.4% menos del PIB, que la media de los países de la Unión Europea en Educación. ANPE incide en que el Pacto Educativo debe incluir entre otras medidas la financiación de manera que aumente la inversión educativa hasta llegar a la media de los países de nuestro entorno y su correcta gestión y distribución.
- El informe afirma que todos los países pueden mejorar el rendimiento de sus estudiantes, siempre y cuando exista la voluntad de poner en práctica las políticas educativas adecuadas. Según la organización, el primer paso sería que los gobiernos convirtieran el bajo rendimiento en prioridad educativa, “y convertir esa prioridad en recursos adicionales”. En ANPE venimos exigiendo que la Educación sea una verdadera prioridad política y social que permita abordar con profundidad las reformas que necesita nuestro sistema educativo precedido de un Pacto Educativo que de estabilidad y cohesión al sistema educativo y que le aleje de la confrontación ideológica permanente.
- Otra de las conclusiones del informe es que, cuanto más exigente e implicado es el docente, menos posibilidades de bajo rendimiento existe en el alumno. El informe reconoce al docente como pieza clave en el rendimiento del alumno. ANPE recuerda que en España sigue sin abordarse la política del profesorado a pesar de ser reiteradamente prometida en todas las legislaturas, a través de un Estatuto Docente como instrumento legal que regule los derechos y deberes del profesorado, que contemple el desarrollo de una auténtica carrera docente objetiva, atractiva y motivadora. En definitiva, un Estatuto que sirva para dignificar la función docente y para mejorar las condiciones laborales y sociales del profesorado.
Una vez realizados los diagnósticos avalados por los informes de la OCDE, es momento de afrontar los nuevos retos y buscar soluciones. No podemos olvidar que siguen vigentes los RD 14/2012 y el RD 20/2014 que han supuesto importantes recortes en la Educación. Por tanto, si queremos convertir a la Educación en una verdadera prioridad hay que derogar dichos decretos, recuperar la inversión educativa y alcanzar un Pacto de Estado o Acuerdo de Mínimos que sea un verdadero compromiso político y social que sirva para dar respuesta a los retos del sistema educativo y estabilidad a las leyes, y para implantar medidas que reduzcan el alto índice de abandono y fracaso escolar, y aumente el rendimiento de los alumnos y así lograr un sistema educativo de calidad.