El rector de la UNED, Ricardo Mairal Usón, ha presidido el acto “Puertollano, capital de la Química Sostenible”, destinado a presentar la nueva Cátedra de Investigación y Tecnología Química Ciudad de Puertollano, que nace gracias a la colaboración entre cuatro instituciones públicas: UNED, Ayuntamiento de Puertollano, Diputación de Ciudad Real y CSIC.
Esta alizanza cuenta ya con tres proyectos dedicados a transferir el conocimiento científico y aplicarlo a la cooperación internacional para mejorar la calidad de vida de las personas de manera global: una beca que permitirá que cuatro investigadoras etíopes -1 en el primer año, 3 en el segundo- completen sus estudios con estancias en distintos centros de i+D de Puertollano; la potabilización de aguas y una red de pozos en el entorno de los poblados que permitan el abastecimientos de los vecinos y la escolarización de las niñas; y una exposición fotográfica “Mujeres de Etiopía”, que recorrerá, primero Castilla-La Mancha, y luego toda España a través de las sedes territoriales de la UNED, e irá destinada a visibilizar las necesidades de cooperación del país africano y recabar fondos para apoyar su desarrollo.
Así fue el acto, en Canal UNED
El rector ha estado acompañado por Isabel Rodríguez García, alcaldesa de Puertollano; José Manuel Caballero Serrano, presidente de la Diputación de Ciudad Real y presidente también del Consorcio Gestor de la UNED; Ángeles, Gómez Borrego; vicepresidenta de Relaciones Internacionales del CSIC y la vicerrectora de Investigación, catedrática de Química, y aglutinadora del proyecto, Rosa María Martín Aranda; Ejercía de maestro de ceremonias el director de la UNED de Ciudad Real, que dirigirá la nueva Cátedra, Pedro Jesús Sánchez Muñoz.
“La puesta en marcha de esta Cátedra supone la necesaria unión de dos de los ejes estratégicos de la universidad: investigación e internacionalización; así como su fortalecimiento a través de la cooperación con instituciones de reputado liderazgo como es el CSIC y la tres ONG que nos acompañan.
En la UNED nos sentimos orgullosos, comprometidos y responsables de este proyecto”, declaraba Martín Aranda. En sintonía, el director de la UNED de Ciudad Real, un centro con sede en Valdepeñas, extensiones en Alcázar de San Juan, Puertollano y Tomelloso, y cerca de 1900 estudiantes, destacaba el trabajo de la vicerrectora. “Ella nos conocía a todos y tejió las relaciones de forma que acabaron constituyendo la Cátedra de Cátedra de Investigación y Tecnología Química Ciudad de Puertollano”.
El reto global de un mundo mejor
Sánchez Muñoz recuerda los primeros pasos de nuevo proyecto. Tanto la alcaldesa, como el presidente de la Diputación como él mismo buscaban revitalizar el proyecto de la UNED en Puertollano, una ciudad con un altísimo índice de industrialización petroquímica. “Queríamos darle un sentido más pegado a la tierra, y creíamos que la mejor forma de utilizar los recursos públicos era implicar a las a las administraciones públicas que forman parte del Consorcio gestor de nuestra universidad.
Todas estamos interesadas en el desarrollo del territorio y en el apoyo de iniciativas de promoción y dinamización de la zona, con el propósito final de mejorar la calidad de vida; la actividad económica y científica de las empresas y centros de i+D ubicados en Puertollano. El reto es fijar la población e incluso promover un movimiento inverso de retorno”
Pero su objetivo no se ciñe a los límites de la ciudad manchega. La colaboración con la UNED y el CSIC permitía engrandecer el objetivo del proyecto. Así una patente de la investigadora del Instituto de Catálisis y Petroleoquímica del CSIC, Isabel Díaz Carretero, abre el camino hacia la transferencia de tecnología y conocimiento hacia África. Resultados de sus investigaciones se materializan en un proceso de purificación del agua en pozos próximos a los poblados, sin electricidad y con materiales autóctonos.
Una patente que aplicada en Etiopía, evita que las niñas, las encargadas de ir a buscar el agua, dispongan de más tiempo y puedan ser escolarizadas. Proceso que explicó la propia Díaz Carretero en su conferencia titulada “Investigación e Internacionalización para la sostenibilidad, desde la Química”.
Sinergias y concreciones
La aplicación de los resultados de esa investigación científica en la obtención de agua potable para abastecer a las comunidades etíopes se unió a la aparición de la ONG ADS que aportó una propuesta de abrir una red de pozos con aguas tratadas según este sistema en el entorno de los poblados.
Su fundador, Francisco Asís Moreno,explicó cómo se está llevando a cabo in situ, que aseguró que esta colaboración es importante “porque la UNED es capaz de garantizar el acceso a la Educación en cualquier lugar del mundo”. En la misma línea se situó la intervención de Ramón Pardo de Santayana, de la ONG Harambee, que ratificó que “si quieres cambiar la sociedad, debes cambiar a la mujer. Y aceptamos el reto de buscar para octubre una mujer química que pueda venir con su beca”.
El siguiente paso sería la formación de investigadoras becadas por la ciudad de Puertollano: una, que será seleccionada este mismo año, y otras 3 para el curso que viene. Todas ellas seguirán una estancia de 3 meses en alguna de las empresas o instituciones de i+D de Puertollano para completar sus estudios.
En este área ha sido deteminante la dilatada experiencia de cooperación internacional de la UNED, como muestran sus convenios con las ONGs Mujeres por África y la Fundación Harambee: la primera, presidida por la ex vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega, con becas a investigadoras africans y la segunda, de reciente incorporación a los proyectos de cooperación internacional para Etiopía de nuestra universidad.
Ángeles, Gómez Borrego, vicepresidenta de Relaciones Internacionales del CSIC, destacó la sintonía del proyecto con la Agenda 2030 de Naciones Unidas. “La puesta en marcha de esta cátedra, auspiciada por el Ayuntamiento de Puertollano, pone de manifiesto el compromiso de este Gobierno con la Ciencia y la Tecnología y supone una apuesta por la alineación con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, pues la Química Sostenible contribuye a varios de ellos: al número 6, relacionado con el agua y el saneamiento; al 7, que tiene que ver con la energía asequible y no contaminante; el 12, producción y consumo responsables; 13, Acción por el clima; el 14, Vida submarina; y 15, Vida de ecosistemas terrestres.
Pero es que además los que aquí nos reunimos -instituciones y ONGs- lo hacemos para contribuir a otros dos ODS más: El 1, fin de la pobreza; y el 2, Igualdad de género. Ángeles Gómez Borrego, vicepresidenta de Relaciones Internacionales del CSIC, destacó la sintonía del proyecto con la Agenda 2030 de Naciones Unidas.
“La puesta en marcha de esta cátedra, auspiciada por el Ayuntamiento de Puertollano, pone de manifiesto el compromiso de este Gobierno con la Ciencia y la Tecnología y supone una apuesta por la alineación con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, pues la Química Sostenible contribuye a varios de ellos: al número 6, relacionado con el agua y el saneamiento; al 7, que tiene que ver con la energía asequible y no contaminante; el 12, producción y consumo responsables; 13, Acción por el clima; el 14, Vida submarina; y 15, Vida de ecosistemas terrestres. Pero es que además los que aquí nos reunimos -instituciones y ONGs- lo hacemos para contribuir a otros dos ODS más: El 1, fin de la pobreza; y el 2, Igualdad de género.
Consenso y alianzas
El presidente de la Diputación de Ciudad Real, José Manuel Caballero Serrano comenzaba su intervención citando al presiente de la II RepúblicaManuel Azapa, que “decía que no le molestaba que un orador no supiera hablar, sinó que no supiera de que hablaba. Así que yo hoy, aquí, no voy a hablar de química”. Tras la cita, mostraba los aciertos de la instauración de la nueva Catedra. “Es posible que en este país haya otros muchos lugares capaces de albergar la Cátedra de Química Sostenible, pero les aseguro que ningún otro como Puertollano, tanto por su vinculación con la química como por la concentración de profesionales de esta área que viven en esta ciudad y en toda la provincia.
Los primeros estudios universitarios que tuvimos aquí fueron los de Química, tres primeros cursos que había que completar con otros dos en Madrid. La UNED tiene esa parte importante de favorecer las segundas oportunidad. Nosotros, que somos muy ricos tanto en vino como en talento, necesitamos que se frente la fuga de talentos. Parece que no hay vida más allá de la Carrera de San Gerónimo en Madrid o Las Ramblas en Barcelona. Y sí. Hay vida, mucha vida. Y la UNED lo sabe. Así que tenemos que cuidar a la UNED para que nos ayude a retener ese talento.
Caballero Serrano aludió a las cifras de périda de talento sufrido en los últimos años por las dos Castillas, “chicas y chicos que se fueron a estudiar fuera y no volvieron. Por eso es tan reconfortante saber que nuestras investigadoras becadas africanas van a volver a África para devolver su talento a su país. Hoy tecnología permite perfectamente desarrollar investigaciones y estudios desde cualquier lugar y trabajar en red con todo el mundo. Estamos muy contentos.
En la Diputación de Ciudad Real destinamos más del 1 por ciento del presupuesto a programas de cooperación. No duden en presentarnos los suyo, porque estamos en disposición y situación de apoyarles. Porque , como decía la escritora hispanoamericana Gioconda Belli, la solidaridad es la ternura de los pueblos”.
La alcaldesa de Puertollano, Isabel Riodríguez García, de la que el relator comentaba “ella y yo sabemos lo que nos ha costado y lo que nos ha gustado llegar a este dí”, hacía gala de sentido del humor. “Aquí hay muy buena química”, decía, para pasar a repasar el trabajo conjunto de Ayuntamiento y UNED a través de casi 30 años de presencia de la universidad en la ciudad. “HA merecido la pena todo el trabajo de estos 30 años. La UNED ha traído las nuevas formas de formarnos, que iban cambiando.
Nuestra ciudad había aportado mucho al PIB de nuestro país y ha pagado muchos peajes por ello. También ahora miramos hacia la sostenibilidad y la industria verde. Tenemos mucho que aportar a todas las entidades que nos acompañan en este proyecto. Una estrategia humilde pero marcada también por los ODS. Con ellos me presenté a las elecciones como candidata al ayuntamiento; con ellos trato de elaborar los presupuestos anuales”.
Rodríguez García destacó otros proyectos que realizará en un futuro inmediato. “Cuando hablamos de sostenibilidad no sólo es medioambiental, es también de personas, de un desarrollo futuro hacia una ciudad más amigable. Hemos estado presentes en todas las transiciones energéticas, siempre con éxito, y la transformación actual nos lleva hacia una tecnología del hidrógeno verde. Hay dos proyectos que se sentarán en Puertollano y se traducirán en asentamiento de puestos de trabajo y políticas de economía circular.
Se trata de la reutilización de residuos animales y de neumáticos. Hay previsto 70 puestos de trabajo y muchos jóvenes que se están formando en nuestras aulas para acceder a un horizonte d empleabilidad. Es un orgullo saber que, además, aquí ponemos nuestro s granito arena para mejorar vida en aquellos lugares que tienen muchas más dificultades que nosotros y que ayudamos a empoderar a las mujeres que pelean para sacar adelante a sus comunidades.
Desde la UNED se incidía en la satisfacción por la aportación de la universidad a la causa del desarrollo y la cooperación global. La vicerrectora de Internacionalización, Laura Alba-Juez, indicaba que “en el vicerrectorado contamos con el Observatorio de Objetivos de Desarrollo Sostenible. Apoyamos y celebramos la puesta en marcha de este proyecto conjunto entre la UNED, el Ayuntamiento de Puertollano y el CSIC, que contribuye a la sostenibilidad a través de la Química y mediante la alianza con instituciones en las que creemos firmemente: las ONGs ADS, Harambee, con la que hemos firmado recientemente un convenio de colaboración, y la Fundación Mujeres por África, a través de la cual desarrollamos un programa propio de becas”.
El rector Mairal cerraría la jornada aludiendo a la vocación de servicio público de la UNED y la proyección social que supone la nueva cátedra. “La Investigación para la UNED es mucho más que uno de sus ejes estratégicos, es la forma de expresión de su vocación de servicio público, el nexo de unión imprescindible en la cooperación institucional desde la que construimos nuestro planteamiento de trabajo y el puente con el que recorremos la imparable senda hacia la internacionalización.
Con proyectos como la Cátedra de Investigación y Tecnología Química Ciudad de Puertollano que presentamos hoy, sumamos a esta triple acción no solo nuestra contribución al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 de Naciones Unidas, sino que incorporamos también una destacada proyección social en nuestro propio país, dando respuesta a los desafíos de los territorios con el soporte indispensable de nuestra red de Centros nacionales”.
Mira los ojos que te miran
Tras la presentación oficial de la Cátedra de Investigación y Tecnología Química Ciudad de Puertollano, personalidades e invitados – entre ellos el cónsul honorífico de Etiopía en España, David Mülchi Panico y Ramón Pardo de Santayana, de la ONG Harambee– pasaron a la visitar la exposición “Mujeres de Etiopía”, que se inaugura en Puertollano y recorrerá, de aquí a agosto los centros de la UNED en Alcazar de San Juan y Tomelloso para continuar, a partir de septiembre, por toda España en las salas de exposición de los centros territoriales de la universidad.
El autor es el investigador del Instituto de Catálisis y Petroleoquímica del CESIC, José Prieto, que un día decidió aglutinar sus patentes en una empresa y dedicarse a su pasión, el mundo de la fotografía, desde la imagen y también desde la investigación en fotografía científica, donde lleva 4 años desarrollando un proyecto para convertir su cámara en un microscopio.
Todo empezó con dos viajes a Etiopía, “en el primero e enamoré del país, con gente que no tiene nada pero es absolutamente feliz”. Era un turista que tuvo la suerte de conocer etnias extraordinarias. En la segunda visita conoció la ONG AIS y y sus trabajos con la población etíope y recordó la experiencia de la UNED de traer a formarse a España a científicas subsaharianas. Y pensó que sus fotografías serían una magnífica fórmula para sensibilizar a los españoles de las necesidades de las mujeres africanas y también para captar recursos. Desde entonces ha realizado muchas exposiciones por distintos países y en el mundo de la fotografía científica se le conoce como Doctor Pepo.
“Es importante la transferencia de tecnología y conocimiento hacia África para que la mujer africana se empodere. Etiopía es un país extraordinariamente machista, ancestral. Los jefes tribus son lso ancianos, no las ancianas. Sin embargo, últimamente la mujer se está empoderando.
Los negocios dependen de ellas; ellas son las que traen el dinero a casa. La política de microcréditos que se ofrecen a las mujeres, porque los hombres se los beben y cualquier benficio que obtienen repercuten únicamente en ellos mismos, hacen que este momento sea crucial. Es importantísimo de traer a recién licenciadas porque cuando vuelven a sui país van a trasmitir estas tecnologías, estos conocimientos para que redunden en la prosperidad de su comunidad.