Los pasos diarios no es tan buen indicador del estado de salud de los mayores: hay otro mejor

De unos años a esta parte se ha pensado que el número de pasos diarios dados por una persona mayor era un indicativos de su salud. Sin embargo, un equipo científico dirigido por investigadores de la Universidad de Jaén (UJA) ha descubierto que este dato por sí solo es insuficiente y hay que completarlo con un elemento más, que aporta una información más completa sobre el estado físico de personas mayores.

La investigación se enmarca en el proyecto Andared, financiado por la Fundación CSIC y cuyo investigador principal es el catedrático de la UJA, Pedro Ángel Latorre. Ha servido para establecer los valores de referencia por edad y sexo de los pasos diarios realizados por adultos mayores, y también para realizar varias intervenciones basadas en el entrenamiento de la marcha dual (marcha con estímulos cognitivos).

Qué dato completa el número de pasos diarios como indicador de la salud de personas mayores

Para que el número de pasos diarios dados por mayores sea considerado como un indicador fiable del estado de salud hay que completarlo con información sobre la intensidad a la que se camina. “Los pasos diarios son una métrica limitada para determinar el estado de salud de las personas, por lo que es esencial complementar el estudio de los pasos diarios con el de la intensidad de la marcha para determinar adecuadamente sus efectos sobre la salud de las personas mayores”, indica el investigador Pedro Ángel Latorre.

En este estudio, en el que han participado 700 mayores, los investigadores observaron que los adultos mayores que cumplieron con los valores de referencia obtuvieron un mejor desempeño en calidad de vida, IMC, riesgo cardiometabólico, depresión y dolor. Sin embargo, no se encontraron diferencias relevantes de estas variables en grupos de edad específicos.

Marcha con estímulos cognitivos

En el proyecto Andared se realizaron varias intervenciones de entrenamiento andando, diseñando un programa de entrenamiento manipulando los elementos de prescripción: volumen, intensidad, sobrecarga, a lo que se añadió estimulación cognitiva mediante el teléfono móvil.

En solo 6 semanas de entrenamiento, 4 días a la semana, en el que se combinaba marcha rápida, lenta, con sobrecarga (llevando una mochila), en desnivel y, sobre todo, con trabajo cognitivo, se produjo una mejora significativa de diferentes parámetros de salud: mejora de la fuerza de piernas, de la capacidad cardiorrespiratoria, mejor estado ponderal, cognitivo y emocional.

“Caminar es el recurso más sencillo, barato y universal y desde una perspectiva de salud pública, se recomienda a las personas mayores para promover su salud. Ya no será suficiente con indicar, desde el sector sanitario, que ‘usted ande’. En este proyecto hemos definido los criterios esenciales de prescripción de la marcha para la promoción de la salud de las personas adultas y mayores”, explica Pedro Ángel Latorre.

Cuántos pasos dan los mayores

En este proyecto se establecen los valores de referencia por edad y sexo de los pasos diarios realizados por adultos mayores españoles. Los resultados más destacados del estudio indican que los hombres dan de promedio más pasos semanales que las mujeres 8.919,08 vs. 7.855,46 y claramente la edad tiene un efecto importante en este parámetro.

En este sentido, se produce una reducción significativa con la edad, de 9.931 pasos en el grupo de edad de 60 a 68 años a 4.659 en el grupo mayor de 80 años, hecho que se manifiesta de manera dramática a partir de los 80 años, confirmando esta edad cronológica como un punto crítico del envejecimiento.