¿Cómo contribuirá la UJA a reducir la dependencia europea de los imanes importados de China?

La mayor parte de los imanes utilizados en Europa proceden de China. Estos productos se emplean en motores eléctricos, generadores eólicos y otras aplicaciones digitales, y el hecho de que tengan que importarse desde el gigante oriental resta competitividad y genera dependencias peligrosas desde el punto de vista económico. Un proyecto europeo liderado por la Universidad de Jaén (UJA) sentará las bases para romper con la dependencia de la producción de imanes en China.

El proyecto, llamado SICAPERMA ha sido presentado por el rector de la UJA, Nicolás Ruiz, Nicolás Ruiz, junto al catedrático de Ingeniería Telemática de la UJA y director del proyecto, Sebastián García Galán, y el director de la Escuela Politécnica Superior de Linares, Manuel Valverde, acompañados por la Vicerrectora de Investigación y Transferencia del Conocimiento, Mª Victoria López, y la representante del proyecto, Maja Ferlinc.

En su intervención, Nicolás Ruiz ha declarado que este proyecto “visibiliza el importante y evidente papel protagonista que tiene nuestra institución en un ámbito que es estratégico para nuestro país”, explicando que el proyecto SICAPERMA, que es una de las iniciativas financiadas en el marco del Instrumento Interregional de Inversiones e Innovación (I3), se configura como “una herramienta fundamental para conjugar dos aspectos que deben ser clave: crear riqueza y empleo, y al mismo tiempo, hacer que Europa sea más competitiva frente a otras economías”.

Cómo la UJA contribuirá a romper la dependencia europea de los imanes importados de China

La UJA trata de romper la dependencia europea de los imanes importados de China con un proyecto de reciclaje de imanes permanentes, definiendo todavía más los desarrollos ya existentes para el reciclaje de los mismos, con el objetivo de que tengan un uso generalizado y que su producción sea rentable a nivel industrial.

Una vez conseguidos estos objetivos, a través de los tres proyectos piloto que se desarrollarán en el marco de la iniciativa, la previsión es construir 21 plantas productivas por toda Europa antes del año 2050.

De esta manera, en un corto espacio de tiempo, se podría reducir la dependencia de las exportaciones chinas de imanes permanentes, que actualmente representan el 98 por ciento del suministro a la UE.

Qué ganará Europa con la producción de sus propios imanes

“La Unión Europea ganaría resiliencia en un área tecnológica crítica para las cadenas de valor y promovería las transiciones verde y digital, ya que estos productos se utilizan en aplicaciones industriales clave, como los motores eléctricos o los generadores eólicos”, ha indicado el Rector.

“De este modo, se construirá una primera estructura con capacidad de generar valor añadido en una tecnología que es vital para el desarrollo futuro, poniéndose en marcha un ecosistema paneuropeo encaminado a reducir nuestra dependencia productiva en este ámbito con respecto a gigantes económicos como China. Como saben, los imanes permanentes son esenciales en tecnología clave, como la energía eólica, la movilidad eléctrica y diversas aplicaciones digitales”, ha explicado Nicolás Ruiz.

Qué supondré medioambientalmente el proyecto SICAPERMA

De esta forma, se espera que el proyecto SICAPERMA reduzca las emisiones de CO2 en 95 toneladas, lo que ilustra cómo esta iniciativa impulsa el crecimiento económico sostenible. Con esa perspectiva medioambiental, la previsión es que pueda generar 5.900 empleos directos y unos 1.800 millones de euros en ingresos dentro de 25 años.

Por su parte, el director del proyecto ha explicado que SICAPERMA “un proyecto muy interesante y extremadamente ambicioso”, que tendrá una duración de dos años y medio, supone una inversión global superior a los 6,2 millones de euros y recibe el 70 por ciento de los fondos procedentes del nuevo Instrumento Interregional de Inversiones en Innovación, que aborda la brecha de innovación en Europa mediante el apoyo a la colaboración entre organismos de diferentes zonas, de distintos países.

En total, el proyecto cuenta con 14 socios de 11 regiones europeas, que asumirán el liderazgo en el ámbito de las tecnologías de reciclaje de imanes permanentes. “La idea es que este cambio tecnológico se lidere a través de las regiones menos desarrolladas que participan en el proyecto. Entendemos que resulta estratégico para la UE, teniendo en cuenta de que el 98% de algunos materiales que son considerados estratégicos proceden de China y con este proyecto se reducirían en un 20% dicha dependencia”, ha declarado Sebastián García Galán, que ha indicado que, en concreto, en el mismo están involucrados dos Departamentos de la EPSL, el Departamento de Ingeniería Química, Ambiental y de los Materiales y el Departamento de Ingeniería de Telecomunicación.