El almacenamiento de la energía renovable, clave para llegar a las emisiones cero

La segunda jornada del Curso de Verano de la Universidad de Almería ‘La transición energética a través de las renovables’ ha tenido este martes la visita de Mela García-Pérez, del Grupo Gransolar, quien ha ofrecido la ponencia ‘Sostenibilidad fotovoltaica y el almacenamiento en la transición hacia las cero emisiones’.

El objetivo de su charla ha sido explicar “la movilidad y la transición energética utilizando energías renovables y sistemas de almacenamiento muy diversos para intentar llegar a la reducción de la emisiones de gases de efecto invernadero y conseguir el objetivo que tiene planteado la Unión Europea de llegar en 2050 a cero emisiones en todo el continente”.

Los estudiantes han conocido más a fondo, de la mano de esta experta, “la legislación de las medidas que se están utilizando y las diferentes tipologías del sistema de almacenamiento que podemos encontrar, que sean sostenibles y que apuesten sobre todo por la economía circular”.

Entre los diferentes tipos de almacenamiento destaca García-Pérez, destaca varios como “el sistema convencional de almacenamiento con distintos tipos de baterías, un sistema hidrológico de almacenamiento con embalse, las sales fundidas y otros tipos que podemos emplear utilizando recargas procedentes de energías renovables, fundamentalmente de energía fotovoltaica que es el campo que estamos tratando en este curso”.

Aunque las energías renovables parecen en un principio ilimitadas, lo cierto es que están sujetas a una serie de condiciones que hacen que su almacenamiento sea imprescindible para poder llegar a las cero emisiones de CO2. “Las energías renovables tienen varias limitaciones por el horario -tenemos momentos en los que no podemos emplearla- y luego, además, también tenemos momentos donde sí disponemos de ella y otros en los que no, dependiendo de las condiciones climatológicas existentes”.

En cuanto a la situación de Almería en el marco de las renovables, Mela García-Pérez ha destacado que “es una ciudad privilegiada porque tenemos 360 días de sol prácticamente al año, con una cantidad de horas solares muy abundante en esta región de Europa y además es una zona donde todos conocemos que existe abundante viento, entonces las dos combinaciones de las principales fuentes de energía renovables dominante, que son la eólica y la fotovoltaica, las tenemos aquí. Sin olvidar la termosolar, que podemos emplearla también, con lo cual es un lugar privilegiado para emplear este tipo de energía”.