La azucarera adquirida por la UGR se convertirá en un espacio de ensayo de un nuevo modelo de ciudad

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La Universidad de Granada y el Ayuntamiento de Granada se reúnen para perfilar los aspectos urbanísticos y de infraestructuras vinculados al Proyecto de la Azucarera de San Isidro.

Tras la adquisición de la Azucarera de San Isidro por la Universidad de Granada el pasado mes de diciembre, la institución universitaria trabaja ya en la confección de un plan director que defina los usos y necesidades de este espacio, y permita acudir a convocatorias de financiación pública.

Simultáneamente, se hace necesario contar con la colaboración de diferentes instituciones que permitan contar con un escenario propicio para este importante proyecto pueda hacerse realidad.

En este sentido, UGR y Ayuntamiento de Granada trabajan ya a través de una comisión mixta en la identificación de las necesidades urbanísticas de este espacio y en su consideración dentro de los trabajos que se vienen desarrollando en relación con la redacción del PGOU y los planes de movilidad urbana, ambos esenciales para el futuro de este nuevo espacio.

Tras la reunión mantenida entre la rectora y el alcalde en el Hospital Real, sede del Rectorado de la UGR, Aranda ha subrayado que se trabaja en la redacción de un plan director del proyecto de la Azucarera que definirá el futuro de un espacio destinado a convertirse en un verdadero laboratorio en el que ensayar un nuevo modelo de ciudad, en el que convivan la formación, la investigación, la gestión, la transferencia y la actividad empresarial con usos residenciales.

Un proyecto que nace de la vocación ciudadana de la UGR y que tiene su eje central en la sostenibilidad. Un proyecto que materializa la conexión entre la ciudad y la vega al tiempo que hace posible la recuperación y la puesta en valor de un importante elemento del patrimonio arquitectónico e industrial de Granada. Ha recordado en este sentido que la azucarera situada en el barrio de Bobadilla (Granada) es un bien declarado de interés cultural (BIC).

La rectora ha subrayado también la importancia de hacer de la Azucarera “una ciudad dentro de la propia ciudad, con características de ‘smart city’, marcada por la innovación, la cultura, la formación, la investigación, el conocimiento y la tecnología”.

Para ello, será fundamental articular en torno a sus instalaciones nodos sostenibles de transporte, espacios de investigación y transferencia para empresas –que fomenten la colaboración público-privada– así como dotaciones de carácter municipal.

El alcalde de Granada, Francisco Cuenca, destacó por su parte la “complicidad” del Ayuntamiento de Granada con el proyecto estratégico impulsado por la Universidad de Granada para convertir la Azucarera en un espacio de investigación y transferencia de conocimiento y en un “gran contenedor cultural e investigador en la ciudad”, para lo que “hemos puesto a disposición de la rectora todos los medios técnicos, humanos y materiales a nuestro alcance para que este proyecto estratégico sea una realidad”.

El máximo responsable municipal ha informado del inicio de los trabajos para incluir el nuevo Plan Director de la Azucarera dentro del nuevo Plan General de Ordenación Urbana de Granada, en el que ha de primar un modelo sostenible y metropolitano, basado en un modelo productivo centrado en la investigación, la ciencia y la cultura.

Cuenca no ha dudado en considerar la Azucarera como uno de los grandes proyectos de la ciudad, por lo que se ha mostrado convencido de que todas las administraciones e instituciones van a alcanzar alianzas esenciales para que sea “un espacio referente, que aspira a ser la futura sede del campus de la biodiversidad y el medio ambiente de la UGR, y a convertirse en un espacio donde converjan distintas manifestaciones artísticas, creativas y culturales”.